Alarga Google vida del libro

Érika P. Bucio / Agencia Reforma

Más de 10 mil editoriales se han suscrito al programa de búsqueda de libros de Google desde que se lanzó la iniciativa hace tres años, permitiendo acercar la oferta de títulos a 400 millones de usuarios potenciales.

"Las editoriales eligen el material que desean promocionar; la gran mayoría empieza enviando el catálogo vivo pero al notar la visibilidad, empiezan a enviar lo descatalogado", explica Marco Marinucci, a cargo del proyecto Google Book, que participó ayer en la FIL con la conferencia El futuro del libro: nuevas tecnologías al servicio del mundo editorial.

Los usuarios no sólo pueden examinar las páginas disponibles de un libro sino también buscar en su contenido, leer reseñas, ir a la página del editor, comprarlo a través de alguna de las librerías en la web, o ubicarlo en el catálogo de alguna biblioteca local.

"No es sencillo medir el impacto de un programa de comunicación, pero las editoriales pueden ver estadísticas de lo que está pasando con sus libros, cuánta gente está interesada en comprarlos.

"No vendemos, pero sí podemos saber cuánta gente hace click en los enlaces de compra del libro y ver desde qué país se hace", describe el ex director de Giunti, una de las editoriales más antiguas de Italia.
Ejemplifica que Ediciones B, con una oferta de 500 mil libros en línea, ha recibido 2.5 millones de visitas y Norma, con mil libros en el programa, 15 millones.

También figuran alrededor de 15 editoriales universitarias mexicanas, entre ellas la UNAM con 2 mil libros en la red.

Por otro lado, está el proyecto de Bibliotecas de Google, con un millón de libros digitalizados, pertenecientes a los fondos de 17 bibiliotecas en Europa y Estados Unidos, que aún no aterriza en México.

"A largo plazo la idea es tener la posibilidad, pero supone una gran inversión de nuestra parte: digitalizar cada libro tiene un costo muy alto, entre 20 y 30 dólares, si se habla de millones de libros, basta hacer el cálculo.

"La misión es la misma, ayudar a las bibliotecas a dar visibilidad a libros de dominio público", concluye.