Atentado, “reacción” de la delincuencia: Montero

No se trató de una advertencia para el gobierno estatal, asegura Montero

El secretario de Gobernación minimizó el atentado contra su compañero Pérez Dorantes y pidió a los medios de comunicación no escandalizar con una “reacción” del crimen por los golpes de las autoridades

Edmundo Velázquez

Para el secretario de Gobernación, Mario Montero Serrano, el ataque que sufrió el subprocurador Víctor Pérez Dorantes es solamente una consecuencia de la lucha de las autoridades poblanas en contra de “un grupo fuerte” del crimen.

Sin embargo el funcionario se negó a hablar de delincuencia organizada en el estado y pidió a los medios de comunicación “no convertir un hecho que se da como reacción, en una advertencia”.

Entrevistado tras la reunión de seguridad llevada a cabo en el Hotel City Express, el funcionario aseguró que “aún Puebla no vive lo que estamos leyendo en cabezas de periódicos y noticias de otros estados”.

“Es una reacción al trabajo que estamos realizando. Si ustedes revisan la semana pasada, se darán cuenta de que hemos mantenido una constante en detención de delincuentes y es parte de ese tipo de actitudes y reacciones”, aseguró Montero.

Además el titular de la Segob mencionó que en Puebla se deberá reforzar la estructura de seguridad pública para que la delincuencia no llegue a las filas de áreas internas o externas, pero insistió que el atentado en que fueron heridos dos empleados de la Procuraduría General de Justicia no tiene porqué “alterar el trabajo” en la seguridad pública.

“Yo creo que es un grupo fuerte que había recibido ya algunos golpes por parte de la Procuraduría y están tomando acciones de desesperación y trata de convertirlas en reacciones de advertencia, pero esto no va a alterar en nada el trabajo de seguridad pública”, subrayó.

Al ser cuestionado sobre si los funcionarios de seguridad tendrán mayores medidas de seguridad, Montero mencionó que seguirán trabajando “con la misma cobertura que lo vienen haciendo”.

—Si los mismos funcionarios no están seguros, ¿qué pueden esperar los ciudadanos?— se le preguntó a Montero.

—Yo creo que sí estamos seguros. Tan estamos seguros, que llevamos una vida cotidiana sin problema. Yo sí quiero que no se altere el orden y se tenga una percepción de que en Puebla hay un clima de inseguridad. No lo hay como en otros estados y son eventos que forman parte del trabajo que es combatir la delincuencia. No estamos en este caso, ni la SSP ni la PGJ lidiando con gente buena o pacífica, lidiamos con delincuentes y bandas, por lo que seguimos combatiendo de la misma manera.

La PGJ resguardada

El subprocurador Víctor Pérez Dorantes se mantiene trabajando, como aseguró vía telefónica el procurador Rodolfo Igor Archundia Sierra. Y es que Pérez Dorantes fue visto tanto en el operativo donde fueron rescatados los presuntos sicarios en Tlapanalá, como ayer en su traslado a la Dirección de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (DIEDO).

Trascendió que la orden de Mario Montero para los funcionarios del Gabinete de Seguridad fue guardar total sigilo sobre el caso y no dar declaraciones a la prensa, al grado que personajes como Mario Ayón e Igor Archundia salieron por la puerta contigua al hotel City Express, donde se llevó a cabo la reunión de seguridad.

Trabajadores de la PGJ informaron que el procurador llegó con Pérez Dorantes tras la reunión, por lo que incluso se habla de que el subprocurador estuvo presente en la sesión con Montero.

El hecho es que el doble de la seguridad acostumbrada se vio ayer en la PGJ, en el lobby y segunda planta se mantuvieron varios judiciales vestidos de civil mientras que en los accesos se agregó una doble escolta armada.

De la salud de los dos trabajadores de Pérez Dorantes, ésta se encuentra estable y aún se mantienen hospitalizados en el Hospital del Issstep, también con sendas escoltas.

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