¡Revive el monstruo de la Laguna!


Santos logró su tercer título en Primera División


Los Guerreros estrenaron el nuevo trofeo de Campeón en Primera División



Edgar Contreras / Agencia Reforma

 

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¡Revivió el monstruo de la Laguna! Santos hizo lo necesario, empató 1-1 en el Corona y aprovechó su triunfo en el Estadio Azul para vencer a la Máquina con global de 3-2, y proclamarse así como monarca del Clausura 2008.


Hace un año, Santos estuvo al borde del descenso; hace seis meses, fueron superlíderes, pero cayeron en la antesala de la lucha por el título. Hoy, Torreón vibra con su campeón por tercera ocasión.


Cruz Azul aumentó su condena 10 años y medio sin títulos en el futbol mexicano, mientras que Santos ya los observa desde el cielo al adjudicarse este domingo el título del Clausura 2008.


Los Guerreros se enfrentaron a un equipo ansioso por revertir la maldición que los aqueja, pero sin experiencia suficiente ni los hombres que marcaran la diferencia en un partido de tal envergadura, como si lo tuvo Santos.


Por eso Daniel Ludueña sepultó las esperanzas celestes al minuto 16 tras colocar el balón al ángulo superior izquierdo del arco defendido por Yosgart Gutiérrez, y así el "Hachita" agradeció el esfuerzo previo de Édgar Castillo que superó en el desborde a Gerardo Lugo, Carlos Bonet y Joaquín Beltrán.


Cruz Azul, un cuadro que durante la mayor parte de la serie exhibió una mejor propuesta ofensiva, se desmotivó con esa jugada y ya no generó esas oportunidades que durante los 105 minutos anteriores de la Final había tenido.


En cambio, Christian Benítez estuvo más cerca del segundo gol lagunero pero sus disparos terminaron arriba del travesaño.


Eso le permitió a la Máquina brindarle una ilusión más a sus jugadores cuando Jaime Lozano empató el partido a un gol al minuto 83, pero ya ni los cinco minutos de reposición que agregó Armando Archundia fueron suficientes para revertir el marcador.


Con pañuelos blancos ondeando en el Estadio Corona, la afición lagunera festejó al nuevo monarca del futbol mexicano, mientras los celestes añadieron una estampa más de desilusión a su ya dolorosa colección de derrotas después del Invierno 1997.


Santos engrosó su vitrina de éxitos, y revivió las glorias del Invierno 96 y el Verano 2001.

 


 
 
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