Alianza educativa no será rehén de minorías


Dice Emilio Zebadúa, integrante del SNTE


Éric Lara y Cirilo Salas, secretarios generales de las secciones 23 y 51 del SNTE, revelaron que ya tienen detectadas a dos personas de Michoacán, Artemio Cruz y Sergio Espinal, detrás de las movilizaciones magisteriales en Puebla


Olivia López Pescador

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Emilio Zebadúa González, presidente de la Fundación para la Cultura del Maestro del SNTE, advirtió que la Alianza por la Calidad Educativa no será rehén de grupos minoritarios de este sindicato educativo y de grupos ajenos al magisterio poblano provenientes de Michoacán, Morelos y Guerrero, que sólo pretenden impulsar sus banderas políticas para tratar de socavar un esfuerzo nacional.


Por su parte, Éric Lara y Cirilo Salas, secretarios generales de las secciones 23 y 51 del SNTE, revelaron que ya tienen detectadas a dos personas de Michoacán, Artemio Cruz y Sergio Espinal, quienes están detrás de las movilizaciones magisteriales en Puebla.


Emilio Zebadúa González, quien también es miembro de la Comisión de Vigilancia y Observación para la Alianza por la Calidad Educativa por parte del SNTE, minimizó el movimiento magisterial en Puebla, ya que insistió en que se trata de un grupo “minoritario” que está inconforme con esta Alianza porque ve afectados sus intereses políticos.


Dejó en claro que la Alianza Educativa es un proyecto de país y una política de Estado, pero eso no significa que no pueda negociarse. Sin embargo, dijo, ante demandas intransigentes que poco tienen que ver con la educación y que sólo buscan cuestiones políticas, no hay nada que negociar.


Acompañado de los líderes sindicales de las secciones 23 y 51 del SNTE, se pronunció en favor de un mayor presupuesto para educación, ya que si no se eleva la educación, lo único que sucederá es que se ampliará el rezago educativo en México.


Explicó que la calidad educativa fue una demanda social del SNTE. Sin embargo, expresó, hay quienes se oponen a que mejore la educación porque en realidad representan otros intereses políticos que tienen que ver con temas energéticos o políticos en otras latitudes del país.


Después de seis días de que permanecen tomadas las instalaciones de la sección 23 del SNTE, el secretario general de la sección, Éric Lara Martínez, descartó la posibilidad del uso de la fuerza pública. Indicó que está dispuesto al diálogo con los maestros poblanos; en tanto, Cirilo Salas, líder de la Sección 51, insistió que, en lo que respecta a sus instalaciones, éstas no se encuentran tomadas sino “sitiadas”.


Ante el anuncio de los maestros disidentes de que ya desconocieron a los dirigentes magisteriales poblanos, ambos líderes sindicales precisaron que sólo el Congreso Nacional los puede destituir de sus cargos como secretarios de las secciones 23 y 51 del SNTE, a pesar de que no han cumplido ni un año en el cargo.


Cirilo Salas explicó que corresponde a las autoridades estatales atender el conflicto político y la gobernabilidad, y que el aspecto sindical ya lo han venido atendiendo en su calidad de líderes.


Durante la conferencia, el líder aprovechó para hacer un llamado a los maestros que se están prestando para ser “rehenes” a que dialoguen a favor de la educación de los niños y jóvenes.


No existe ninguna bandera, aunque sea justa, por la que los maestros deban abandonar las aulas y las escuelas, dijo, “eso nunca lo va apoyar el SNTE porque el sindicato jamás va a poner en riesgo la paz, ni la tranquilidad de Puebla”.

 

Asimismo, reveló que ha podido constatar que ha habido presencia de integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) creando espacios de rebelión, recorriendo escuelas y pidiendo dinero a los maestros, por lo que se empieza a generar cierta represión, y convocó a los docentes inconformes a que no sean rehenes de nadie.

 

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