Karla Paola de la Cruz, de 19 años de edad, es la mamá de Juan Diego, el bebé que nació prácticamente a bordo de una camioneta en el estacionamiento del Hospital de la Mujer, de la ciudad de Villahermosa, Tabasco.
La joven madre asegura que siente felicidad al ver a su hijo sano y salvo, aunque todavía siente enojo e impotencia al recordar los momentos de angustia que pasó cuando le cerraron las puertas para recibir atención médica en el hospital.
No quisiera que ninguna mujer pasará por esto, uno se siente morir, piensa en el bebé, que no le pase nada, uno sólo piensa en el niño y pide que viva”, dice Karla.
Recordó que “el miércoles empecé a sentirme mal y mi mamá y mi suegra me acompañaron al Hospital, cuando llegamos se acercaron a la ventanilla de admisión; allí dijeron que me sentía mal que ya estaba sangrando y contestaron que tenía que pagar 50 pesos de consulta, pagamos y regresamos con el papel, entonces me dijeron que tenía que esperar porque habían 20 personas más delante de mí”.
Entonces me fui al baño, como nadie me atendía y tenía que esperar, mis familiares y yo decidimos ir a otro hospital, el Rovirosa (Hospital Gustavo A. Rovirosa) donde también atienden partos, caminé y me subí a la camioneta, yo estaba muy mal y sentía que me iba a morir y que también mi bebé se iba a morir, escuchaba la voz de mi madre que me gritaba: No te duermas, Karla… Karla, por favor piensa en tu hijo”, comentó.
En medio de la desesperación por el estado en que se encontraba su hija, la madre de Karla, Daniela Contreras, se armó de valor para lo que viniera.
Yo recibí a mi nieto, nadie me ayudó. Cuando vi que Karla estaba muy mal corrimos mi consuegra y yo a la puerta del hospital, al área de urgencias, el guardia nos vio y cerró la puerta y se volteó ignorándonos para hablar por su teléfono celular; regresé a la camioneta y dije: éste bebé va a nacer aquí y le dije a Karla no te desmayes porque si no el niño se muere, Karla piensa en tu hijo”, relató.
Karla recuerda que ante el barullo, la gente se empezó a congregar en la calle, fue entonces que salió un doctor, pero para entonces el niño prácticamente ya había nacido.
Creo que la falla estuvo en el personal, porque cuando uno llega pidiendo ayuda, mínimo alguien se debe acercar, me cobraron además una consulta, que por cierto, nunca nadie me dio en ese momento, cuando lo necesitaba”.
Cuando me ingresaron al hospital, enfermeras y médicos me culparon a mí y me decían que había sido mi culpa porque para qué me había yo retirado del hospital. Las enfermeras eran las más burlonas, inclusive cuando me dieron de alta, cuando fui por el certificado de nacimiento, una de las muchachas del certificado hizo muchos comentarios que la culpa no era del hospital, ni del personal, sino de mi familia y mía; además que era mi responsabilidad por no llevar mi control, pero yo llevaba bien mi control”, finalizó.
AL MENOS 1% SUFRE VIOLENCIA OBSTÉTRICA EN TABASCO
El secretario de Salud del Estado de Tabasco, Rafael Arroyo Yabur, informó que ya se realiza la investigación para conocer la responsabilidad que tuvo el personal del hospital.
Al menos uno, o menos de uno por ciento de las 50 mil mujeres que se atienden al año en los hospitales públicos de Tabasco por parto, se puede considerar que tuvieron alguna violencia obstétrica, al no ser atendidas debidamente.
Advirtió que quien o quienes resulten responsables por la negligencia ocurrida el martes 20 de septiembre, donde la joven Karla dio a luz en las afueras del hospital por falta de atención, podrían ser sancionados o incluso hasta despedidos.