Vecinos de esta localidad exigieron a la Fiscalía General del Estado (FGE) que realice una investigación de oficio, ya que aseguran que en los bares de la localidad hay trata de menores, además que constantemente se presentan riñas, y pese a que se han reunido con el alcalde Miguel Ángel Ramírez, éste no ha dado solución a la problemática.
Los habitantes dijeron que hace quince días la Dirección de Protección Civil Municipal clausuró lugares catalogados como focos rojos: la Antigua Estrella, Caballo Negro, por carecer de programa interno de Protección Civil, y en esa ocasión el titular del área, Ángel Castillo, aseveró a CAMBIO Regionales que en dichos negocios había señalamientos sobre prostitución de menores, pero que no podían proceder en esto último, toda vez que no era de su competencia.
Aunque el director de Protección Civil dijo que sólo existen cuatro centros nocturnos en el municipio, los vecinos afirmaron que son al menos 10 establecimientos los que operan.
“Lamentablemente, el problema va más allá del ruido, en esos establecimientos hay constantemente riñas, vemos entrar y salir a niñas que creemos se prostituyen”, declaró Guadalupe E., vecina de un centro nocturno en la calle Ignacio Zaragoza.
A decir de Cándida R., otra vecina, hace más de un año que los vecinos de la zona se han reunido con el edil para exigirle que intervenga, pero no han tenido respuesta, a lo que concluyen: “no sabemos si él esté recibiendo moches de los bares o cuál es la razón para no hacer nada”.