El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) realizó el peor negocio de su vida al entregar en 50 millones de pesos a la constructora Blueicon los más de 60 mil metros cuadrados del nuevo complejo comercial donde se ubicarán sus nuevas oficinas, tasando en 833 pesos el metro cuadrado, cuando su costo en la zona alcanza los diez mil pesos, perdiendo así una ganancia que pudo ser de más de 600 millones de pesos.

El nuevo presidente del organismo, Carlos Montiel Solana, detalló que los 50 millones de la “cesión” no serán dados en moneda, sino con el pago de las nuevas oficinas del CCE que estarán totalmente equipadas “hasta con computadoras” y que representan el mismo valor de lo que fue la “venta” a Blueicon.

Por su parte, la constructora poblana que se comprometió a hacer este pago en especie con las nuevas oficinas de lujo, realizará una inversión de más de 500 millones de pesos para construir el desarrollo My Residence que tendrá espacios comerciales y residenciales y que albergará la nueva sede del organismo empresarial.

El presidente del Consejo señaló que el predio se mantendrá en propiedad del CCE al tiempo que dure la construcción, ya que una vez terminado My Residence, el terreno pertenecerá a Blueicon.

Con esto, el CCE hizo un terrible negocio vendiendo el predio que le fue cedido en 2004 por el entonces gobernador Melquiades Morales Flores en apenas el 8.3 por ciento del valor comercial real perdiendo así más de 550 millones de ganancias a cambio de unas oficinas de las que el propio Montiel Solana no tiene certeza de cuándo estarán concluidas y disponibles para su uso.

Sin embargo, la nueva sede representará el tres por ciento del total del terreno, dado que será un área de trabajo que ocupará dos mil de los 60 mil metros cuadrados, por lo que tasado en 10 mil pesos por metro cuadrado es una ganancia para el Consejo, debido a que ese espacio apenas alcanzaría los 20 millones de pesos y el organismo recibirá 50 millones en especie al término de la construcción en tres o cuatro años.

El espacio sobre la Avenida Cúmulo de Virgo fue entregado al organismo por cien años bajo la figura de comodato durante la gestión de Melquiades Morales Flores, como parte del Programa Institucional 2005-2011 del Fideicomiso de la Reserva Territorial Atlixcáyotl-Quetzalcóatl, mediante la entrega de tierras por “superficies fideicomitidas”.

El objetivo de esta entrega era la construcción de un nuevo edificio para albergar al CCE, no obstante, el organismo no lo desarrolló acusando que no recibió en su tiempo ningún apoyo por parte del sexenio marinista; aunque el terreno no le fue requerido por el gobierno estatal ya durante la gestión de Rafael Moreno Valle.

El pasado 29 de junio se hizo la ceremonia de colocación de la primera piedra del megadesarrollo comercial y residencial que encabezó el gobernador Rafael Moreno Valle, en donde el ex presidente del CCE en Puebla, Fernando Treviño aceptó que la idea de la construcción de un edificio con sus nuevas oficinas llevaba más de 12 años planificándose, y que fue el propio mandatario estatal quien ayudó a darle solución al asunto.