En los últimos seis años, el gobierno federal ha dado un golpe a los cárteles de la droga en Puebla que incluye el decomiso de 21 bienes inmuebles, 636 camionetas de diversos modelos, mil 700 armas entre largas y cortas, además de 683 mil pesos en efectivo.
En comparación con el sexenio de Mario Marín Torres (2005-2011), elementos de la Marina Armada de México y el Ejército han realizado mayores operativos en lo que va de la administración morenovallista, de acuerdo con información proporcionada por la Procuraduría General de la República (PGR) vía Infomex.
El año en el que más confiscaciones se registraron en diversos puntos de la entidad fue en 2012 con 153 vehículos, 285 mil 540 pesos en efectivo, 527 armas, además de nueve casas.
El 23 de julio de ese año –2012– tras una intensa movilización de elementos federales y estatales en los fraccionamientos Bosques de Angelópolis, La Calera y Lomas de San Alfonso, fue capturado el líder regional de Los Zetas, William de Jesús Torres Solórzano, alias “El W”. En esa ocasión, fueron incautadas al menos cinco camionetas que quedaron a disposición de la Procuraduría General de la República.
En 2010, la empresa norteamericana de consultoría en materia de inteligencia Stratfor dio a conocer una infografía en la que se detalla la presencia de narcotráfico en México y por primera vez figuró Puebla –particularmente la zona norte- como un área en disputa entre las organizaciones que operaban desde Veracruz (en su momento controlada por el cártel del Golfo en tiempos de Osiel Cárdenas Guillén, pero que después quedó bajo control de los Zetas, su antiguo brazo armado) y las diversas organizaciones afincadas en Guerrero.
Camionetas y armas, lo más incautado al narco en Puebla
Aunque la PGR evitó proporcionar los nombres de los grupos criminales a los que pertenecen los bienes asegurados del 2011 a septiembre de este 2016, archivos periodísticos dan cuenta que el estado ha refugiado a capos de la droga así como a sus familiares, principalmente en zonas exclusivas de la zona metropolitana.
En ese periodo, elementos federales decomisaron a diversos grupos de la delincuencia organizada un total de 2 mil 381 bienes, además de 683 mil pesos. En el desglose que proporcionó la PGR se especifica que en lo que va de este sexenio no han incautado aviones como en el gobierno de Mario Marín que se reportaron dos casos.
En 2011 fueron seis los bienes inmuebles confiscados, 120 vehículos, 210 mil 693 pesos, 384 armas cortas y 170 largas, mientras que en 12 bienes fueron clasificados como “otros”. En 2012, federales aseguraron 153 vehículos, 285 mil 540 pesos en efectivo, 527 armas además de nueve casas.
En el año 2013 se sumaron cinco casas, 102 vehículos, 59 mil 971 pesos, 267 armas, y en un caso no fue especificado. En 2015 no hubo bienes inmuebles pero sí 83 vehículos, 200 pesos y 92 armas.
Y en lo que va de este 2016, según la PGR, sólo han sido decomisadas siete armas y dos camionetas.
Todo lo retenido tanto en la entidad como en otros estados del país termina bajo la tutela del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), una paraestatal que administra y liquida los bienes transferidos al Estado.
Todo este stock es almacenado en alguna de sus 60 bodegas con las que cuenta el gobierno federal.
Los dos aviones de Marín
Lo que distinguió a la administración de Marín Torres en cuanto al golpe al narcotráfico fue el aseguramiento de dos aviones además de 408 joyas. En total, fueron incautados en ese sexenio 19 inmuebles, 216 autos de lujo, 998 armas así como 816 mil 315 pesos.
Entre los golpes que se dio en esta administración destaca que el 9 de septiembre del 2009, luego de una balacera, se detuvo a Sergio Ruiz Tlapanco, alias ‘El Z-44’, quien vivía con su familia en el Fraccionamiento Lomas de San Alfonso.
Un año después, el 24 de junio del 2010, en San Pablo Xochimehuacán, autoridades federales y locales detuvieron a Manuel Antele Velasco, mando de Los Zetas en Puebla.
En la historia de Puebla con el ‘narco’ también destaca la detención de Benjamín Arellano Félix, cabeza del Cártel de Tijuana el 9 de marzo del 2002 en una exclusiva zona residencial de la capital poblana.
En 2007 se asentó Ismael Coronel Sicairos, conocido como ‘El Judío’ y considerado por la PGR como quien lavaba el dinero de los Beltrán Leyva.
En Puebla se consideraba a ‘El Judío’ como un ganadero emprendedor que invirtió millones en la reproducción de búfalos de agua, a cambio de que la administración de Marín le proporcionara pastizales, y a quien solía acompañar en eventos públicos, hasta el 20 de enero del 2011 cuando fue detenido y trasladado al Penal del Altiplano.
El 3 de noviembre del 2001, la Procuraduría General de la República y el Ejército pretendían capturar a Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera en una zona residencial de Puebla que se ubica en la Calle 29 Sur, número 3907 del Fraccionamiento Las Animas, donde permaneció un día antes en compañía de su esposa Griselda López Pérez.
