Debido a la gran cantidad de vehículos que Volkswagen de México –instalado en Cuautlancingo Puebla– exporta a Estados Unidos, podría convertirse en la planta más afectada si el candidato a la presidencia en el país del norte, Donald Trump gana la elección el próximo ocho de noviembre.

Según previsiones del analista estadounidense John Tuman, entrevistado por el periódico de circulación nacional Reforma, la industria automotriz de México resultaría gravemente perjudicada si el aspirante impone un arancel del 35 por ciento en vehículos importados.

En evidente violación al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Tlcan), el impuesto que plantea Trump sería un arma de doble filo para Estados Unidos, pues seis de los 42 automóviles víctimas del arancel tienen más de 45 por ciento de insumos estadounidenses.

“Si bien no tiene alto contenido de insumos estadounidenses, la armadora Volkswagen en México sería la que tendría más modelos afectados por el arancel de Trump al exportar hacia el mercado estadounidense al menos 16 modelos distintos, desde el VW Beetle hasta el Golf”, refirió el especialista.

De acuerdo con datos de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), la planta de Cuautlancingo es la que mayor cantidad de unidades fabrica para la exportación, 36 mil.

A un año del escándalo Dieselgate, Volkswagen México obtuvo su primer repunte en 11 meses en este rubro al alcanzar las 36 mil 155 unidades y de enero a agosto de este año se han exportado 227 mil 886 automóviles.

Esta propuesta de gravamen a los autos producidos en México provocaría daños no pensados por Trump en ciudades dedicadas a la industria automotriz como el área metropolitana de Detroit, la cual exporta anualmente más de 20 mil millones de dólares, la mayoría conectada a la industria de autopartes, concluyó la AMIA.