José López Bautista, además de asesinar a su esposa e hijas, las mutiló para comerse partes de sus cuerpos, según revelaron a A Fondo Estado de México fuentes cercanas al caso.
Tras el macabro hallazgo realizado la noche de ayer, en la sección Bosques de Los Héroes Tecámac, donde un ex policía mantuvo los cuerpos de su esposa e hijas una semana después de asesinarlas, se informó que el responsable cometía actos de canibalismo al consumir partes de sus cuerpos, esto tras haber acudido a una especie de retiro espiritual el pasado 31 de diciembre.
Fue la noche de ayer cuando José López Bautista, de 34 años, fue detenido por policías de la Secretaría de Seguridad del Estado de México, que ingresaron a su casa donde se había atrincherado después de asesinar a su esposa e hijas.
Tras identificar a Esther Alicia Castro Luzanilla, de 36 años, Alessandra López Castro, de 5, y Loreto Pérez Castro, de 1 año con 4 meses de edad, esposa e hijas del asesino respectivamente, autoridades detuvieron a López Bautista, quien sin remordimiento alguno confesó los crímenes.
Dijo que el 31 de diciembre acudió a un retiro espiritual a Tlaxcala, y regresó el 1 de enero, día en que mató a su esposa a quien estranguló y mutiló posteriormente mientras las niñas jugaban en uno de los pasillos.
Posteriormente, afirmó una fuente consultada, el sujeto dijo que mató a la pequeña Alessandra, cuyo tórax abrió y le sacó los órganos, los cuales depositó en una cubeta y le cortó la mano, la cual comenzó a comer.
Añadieron que confesó haber rociado cal y cloro para disimular el olor de los cuerpos en descomposición a los que después cubrió con cobijas.
Asimismo, autoridades informaron que el desequilibrado hombre intentaba incendiar la casa, no solo la ropa, versión que inicialmente se manejó, por lo que se atrincheró y obligó a los uniformados a entrar.
Luego de la detención y el traslado de los cuerpos al Semefo, autoridades iniciaron la carpeta NUC: ECA/FHM/ECH/034/004652/18/01 y NIC: FHM/ECH/00/MPI/064/00003/18/01 por el triple feminicidio cometido el día de ayer, en uno de los episodios más espeluznantes en la historia del municipio y del estado de México.