Este martes, en el municipio de Tulcingo del Valle, familiares, amigos y conocidos, le dieron el último adiós a Emeli V. R. quien fue abusada sexualmente y estrangulada, en su habitación, la madrugada del pasado domingo. El sepelio, se convirtió en una protesta, en la que la madre de la pequeña, Maribel Ramírez, exigió que se encuentre y castigue al o a los responsables del feminicidio número 6.
Cientos de personas acompañaron a la pequeña quien ya descansaba en un pequeño ataúd color blanco. Sus restos fueron velados la noche de este lunes en el domicilio de sus abuelos, y este martes, se realizó una misa de cuerpo presente, y finalmente fue enterrada en el panteón de la localidad.
Como se sabe, la mañana del domingo, Maribel R. encontró a su hija de once años de edad, sin vida y con rastros de haber sido atacada sexualmente. El ataque, habría ocurrido entre las 4 de la mañana y las 8 de la mañana, horario en el que la menor se encontraba sola en su casa.