El interno Arturo Romero Aparicio, alias "El Cachibombo", se encarga de operar el rentable negocio del sexo y las visitas conyugales en el Cereso de San Miguel, pues además de cobrar por los servicios de agua potable o cigarros, percibe cerca de 20 mil pesos diarios por rentar espacios en las "casitas", un lugar improvisado para visitas íntimas.
Fue precisamente en una de estas "casitas" donde el sábado pasado fue apuñalada una mujer por el interno Jorge Salvador G., quien presuntamente no soportó que la víctima quisiera terminar la relación que inició con él hace dos años.