El temblor de 8.2 grados en la escala de Richter que sacudió a Puebla dejó daños estructurales en hospitales de San Alejandro del IMSS, el del ISSSTE; en las instalaciones de la Secretaría de Finanzas y Administración; en algunos inmuebles de la BUAP, además de deslaves en carreteras del estado.
A las 23:49 horas del pasado siete de septiembre un sismo que cimbró la mayor parte del centro y sur del país: Estado de México, Hidalgo, Tlaxcala, Morelos, Veracruz y Puebla, además de las zonas costeras de Chiapas, Oaxaca y Tabasco, entidades que presentaron el mayor número de afectaciones y pérdidas humanas, tuvo una duración de 153 segundos y su epicentro fue localizado en el Golfo de Tehuantepec a 133 kilómetros de Pijijiapan, Chiapas, registrando 928 réplicas siendo la más alta de 6.1 grados de magnitud, según datos del Servicio Sismológico Nacional.
Aunque el gobernador del estado, Antonio Gali Fayad destacó saldo blanco en cuanto a víctimas mortales, garantizó que se harán inspecciones en todos los inmuebles para descartar que no haya alguno que ponga en riesgo a los poblanos, pues debido a su gran magnitud dejó al menos 90 muertos, principalmente en Oaxaca y Chiapas.
Daños materiales en la capital
Aunque no cree necesario ocuparlos, el gobernador aseguró que dispone de una bolsa de 70 millones de pesos para atender cualquier afectación por sismo.
Según los inspectores de Protección Civil, durante las primeras revisiones sólo se encontraron daños superficiales que no atentan en contra de las estructuras de los inmuebles, situación que refrendó el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en un comunicado, señalando que este lunes, ingenieros especialistas de la Ciudad de México llevarán a cabo un estudio más profesional para determinar las condiciones del nosocomio.
Sin embargo, todos los hospitales, las diferentes Unidades Médico Familiares, así como las 37 guarderías de la Institución en todo el estado este día reiniciarán sus labores normalmente.
Otro edificio que presentó algunos daños fue el del Poder Judicial de la Federación donde los plafones de varias partes del edificio cayeron, se rompieron algunos ventanales y recubrimientos así como varios anaqueles tirados.
Asimismo entre los daños se encontró la caída de la barda de una casona ubicada en el barrio de Santa Anita donde sobre la 26 Poniente, entre la 11 y 9 Norte, la estructura se desplomó sin ocasionar mayores afectaciones.
Especialista recomienda revisión constante
Sobre el tema Hugo Ferrer Toledo, decano de Ingenierías de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), consideró que los edificios antiguos del Centro Histórico deberán ser revisados constantemente pues pueden tener fracturas internas que ponen en riesgo la vida de quienes ronden por las zonas.
Esto va en correlación al daño que sufrió uno de los ‘floreros’ del Salón de Cabildo en el Ayuntamiento de Puebla el cual está tallado sobre la misma estructura del inmueble por lo que para poder ser resanado, se le inyectará concreto a fin de resarcir el daño que pueda tener.