El quebranto generado por el robo de combustible a través de tomas clandestinas a Petróleos Mexicanos (Pemex) asciende a más de 107.7 millones de pesos, tan solo por lo sustraído de manera ilegal en el territorio poblano de enero de 2019 a mayo de 2024.
De acuerdo con información proporcionada por la propia empresa paraestatal, desde enero de 2019 a mayo de 2024, el robo de combustible generó pérdidas por tres mil 269 millones 143 mil 746 pesos en todo el país.
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Fue el primer año de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando se detectó la mayor pérdida económica, al reportar una quebranto por mil 972 millones 714 mil 948 pesos.
Para 2020, la cifra disminuyó radicalmente al pasar a 225 millones 83 mil 194 pesos y 278 millones 593 mil 730 para el año siguiente.
En 2022, la empresa reportó una perdida por más de 219 millones de pesos y en 2023 la cifra ascendió a 219 millones 75 mil 702 pesos.
En tan solo cinco meses del 2024, la pérdida económica repuntó a 365 millones 257 mil 716 pesos. Lo que representa un promedio diario de 2.4 millones de pesos perdidos por el huachicol en este año.
Asimismo, se detectaron 84 mil 170 perforaciones en los ductos de Pemex, durante estos poco más de cinco años, lo que representó un costo promedio de 38 mil 839 pesos perdidos por cada toma clandestina.
Al contabilizar las perforaciones detectadas en territorio poblano, desde enero de 2019 a mayo de este año, se han registrado dos mil 773 tomas clandestinas, lo que significó que en Puebla el quebranto ascendió a 107 millones 702 mil 488 pesos.
Esta cantidad representó el 3.2 por ciento del total de lo perdido a nivel nacional por Pemex desde que Morena llegó al poder.
Sin embargo, durante este 2024 prácticamente se duplica, pues por cada ordeña detectada en territorio poblano, la suma del quebranto es de 24.5 millones de pesos; es decir, 71 mil 89 pesos por cada una de ellas.
Pemex presenta más denuncias que tomas clandestinas
De acuerdo con lo reportado por PEMEX, la Gerencia de Estrategia y Sistemas de Seguridad y Monitoreo de la paraestatal reportó que en este mismo periodo se presentaron cuatro mil 258 denuncias ante las diferentes autoridades.
Esta cifra, incluso es más alta que el total de las tomas clandestinas, que fue de dos mil 773 en este mismo periodo.
Esto significó un promedio de una denuncia presentada ante las autoridades poblanas cada 11 horas por robo de combustible, en su modalidad de hidrocarburo.
