Tannia “N”, la mujer que denunció haber vivido violencia familiar y hasta haber sido víctima de intento de feminicidio en manos de su ex pareja sentimental, se manifestó esta mañana a las afueras de la Fiscalía de Puebla para pedir justicia y como forma de protesta, hasta se cortó el cabello.
😡⚖️¡Teme por su vida!
— Diario Cambio (@Diario_Cambio) November 21, 2024
Tannia N., la mujer que denunció a su expareja Leopoldo N., dueño de Farmacias Perla El Carmen, por violencia familiar y tentativa de feminicidio, como protesta se cortó el cabello a las afueras de la Fiscalía de Puebla para exigir que su agresor sea… pic.twitter.com/TdPWLTAB0t
La cabellera larga que mantuvo Tannia “N” durante varios años, fue cortada por ella misma esta mañana de jueves en inmediaciones de la Fiscalía del Estado como forma de protesta, exigiendo una pronta respuesta de las autoridades, ya que, asegura, su vida cada vez más corre peligro, pues su ex pareja sentimental continúa amenazándola y acosándola.
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Al filo de las 11:00 horas, la mujer llegó a las instalaciones del organismo investigador, ubicadas sobre el Bulevar 5 de mayo y la 31. Ya estando en el lugar, se plantó con un cartel, explicando el calvario por el que atraviesa.
Como se dio a conocer en entrevista para DIARIO CAMBIO, Tannia “N” denunció la situación en la que vive actualmente tras separarse de su expareja Leopoldo “N”, dueño de una empresa de transportes y de Farmacias Perla del Carmen, en la ciudad de Puebla.
El hombre es señalado por violento, actualmente, cuenta con tres denuncias puestas en su contra ante la Fiscalía General del Estado por violencia familiar y amenazas de muerte.
De acuerdo a lo contado por la mujer a este portal, Leopoldo “N” le provocó tres abortos sin el consentimiento de ella, además de que la golpeaba y dejaba varios días sin comer, no obstante, también le llegó a pegar una bala con un mensaje amenazante que dejó cerca de su casa.
“Y la próxima va para tu cabeza si sigues molestando”, decía.
Ante la desesperación de ya no saber qué hacer, Tannia “N” no tuvo de otra que acudir nuevamente a la dependencia del organismo investigador, pero ahora, no para denunciar algún delito, sino para darse a notar de alguna forma, pues está desesperada y sobre todo intranquila y temerosa de que vayan a hacer algo contra ella, ya que, recientemente, hasta la bañaron en gasolina.