En medio de reclamos y abucheos, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, fue rechazado por decenas de personas que se encontraban en la funeraria San José de Uruapan, donde se realizaban los servicios fúnebres del alcalde Carlos Manzo Rodríguez, asesinado la noche del sábado durante una agresión armada tras la inauguración del Festival de las Velas.
🔴🫢 "¡Asesino!"
— Diario Cambio (@Diario_Cambio) November 2, 2025
Así es como habitantes reciben al gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, quien apareció en el velorio del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, ejecutado ayer, a pesar de haber solicitado apoyo de seguridad en múltiples ocasiones #diariocambio #Puebla… pic.twitter.com/9ibdXi8v53
De acuerdo con testigos, el mandatario estatal ingresó al recinto para ofrecer condolencias a la familia del edil, sin embargo, su presencia generó molestia entre los asistentes, quienes comenzaron a gritarle y exigirle que se retirara. Tras permanecer unos minutos, Ramírez Bedolla salió apresuradamente de la funeraria entre reclamos y consignas, abordando su camioneta mientras la multitud le gritaba “¡Fuera, fuera!”.
El rechazo ciudadano se da luego de que trascendiera que Manzo había solicitado apoyo de seguridad en diversas ocasiones, debido a amenazas en su contra, sin que recibiera respuesta por parte del gobierno estatal. En redes sociales, circuló incluso un video del último encuentro entre ambos, donde el gobernador se burlaba del edil con frases irónicas.
“¿Cuántos has abatido?, el presidente es cosa seria”, comentaba burlonamente el gobernador Ramírez al alcalde de Uruapan.
Más tarde, Ramírez Bedolla publicó un mensaje en la red social X, en el que aseguró haber acompañado a la familia del alcalde y expresó su indignación por el crimen. Prometió que su gobierno “dará la cara y actuará de inmediato para garantizar justicia y paz para el pueblo de Uruapan”.
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