Debaten sobre Mouriño entre acusaciones
El debate se dio luego de que en la última semana el FAP exigió realizar la discusión y el blanquiazul lo evitó durante tres sesiones
Claudia Salazar / Agencia Reforma
Los grupos parlamentarios del PAN y del Frente Amplio Progresista (PRD-PT-Convergencia) debatieron el caso de los contratos firmados por el Secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, entre acusaciones mutuas de falta de ética, incongruencia y cinismo.
El debate se dio por fin durante la sesión de la Cámara baja, luego de que en la última semana el FAP exigió realizar la discusión y el blanquiazul lo evitó durante tres sesiones previas.
Esta vez, los legisladores del FAP ya no tomaron la tribuna ni desplegaron mantas y pancartas contra Mouriño y Felipe Calderón.
Ahora sólo hubo banderines en las curules de los diputados y permitieron el desarrollo del debate sin gritos ni interpelaciones.
Al posicionar el tema, el perredista Octavio Martínez exigió la renuncia del Secretario de Gobernación, dado que, dijo, ha aceptado públicamente el haber firmado contratos con Pemex a favor de la empresa vinculada con su familia cuando él fungía como servidor público.
Luego involucró a César Nava, secretario particular del Presidente Felipe Calderón, de estar involucrado en la red de corrupción que avaló los contratos a las empresas vinculadas con Mouriño, cuando era el abogado general de Pemex.
"La irresponsabilidad por estas irregularidades alcanzan también a los abogados que laboraban en el oficina del abogado general de Pemex, César Nava, actual secretario particular de Calderón, y su sucesor, José Néstor García, y funcionarios de Pemex Refinación, que autorizaron los contratos y quienes habrían incurrido en delito patrimonial", expuso.
El diputado del PT, Pablo Arreola, aseguró que el caso de Mouriño echó por tierra los dogmas que el PAN usó para criticar los gobiernos priistas, en el sentido de no usar los cargos públicos para obtener beneficios privados.
"Qué lejos están estas conductas de los principios éticos que el PAN dice defender", reclamó.
El diputado del PAN, Rogelio Carbajal, uno de los más cercanos al grupo de Calderón y Nava, reclamó a los diputados del PRD sus acusaciones a Mouriño y el Gobierno federal, cuando no pueden tener una elección interna limpia.
"Ahora resulta que nos vienen a dar clases de ética los que roban urnas, los que queman boletas electorales, los que falsean conteos rápidos, los que llevan en la oscuridad sus conteos y sus cómputos para saber quién ganó una elección interna.
"Ellos nos vienen a dar clases de ética y de moralidad de vida pública", expresó Carbajal entre aplausos y gritos de apoyo de los panistas.
También del PAN, Edgar Ramírez Pech afirmó que los perredistas trataban de descarrilar los temas nacionales cuando se descarrila su propio partido.
Urgió al Frente Amplio Progresista a presentar una denuncia antes autoridades correspondientes para presentar ahí las pruebas que dicen tener y no se actúe conforme al capricho de alguien.
"Bien dicen que cuando uno anda desesperado se trata de agarrar de cualquier clavo ardiente y debo decir que muy mal han de andar las cosas internamente entre quienes hoy tratan de revivir este tema, para tratarse de agarrar de este clavo ardiente, en el cual ya van de caída y de derrota", expresó Ramírez Pech.
Por su parte, el perredista Juan Guerra también reclamó a los panistas su doble moral, porque si se trata de un funcionario del PAN, entonces se deben de ocultar todo tipo de ilícitos cometidos y hacer como que no pasa nada.
"No se necesita que lo denunciemos, se persigue de oficio, todo lo que haga un funcionario de Acción Nacional es limpio, es pulcro, por favor, ese cinismo es de las cosas que sí ha aportado este Gobierno", manifestó el perredista.
Por el PRI, Adolfo Mota expuso que la posición de su bancada es llegar hasta el fin de las investigaciones en la comisión creada para ello, porque está en duda la actuación del Secretario de Gobernación previo a que asumiera el cargo.
"El PRI no exonera ni culpa a nadie a priori", aseguró.
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