Aún no identifican a los calcinados de San Felipe

A causa de las graves heridas y la falta de detalles

La Procuraduría General de Justicia confirmó que solamente resultaron heridas siete personas

Edmundo Velázquez

Los cuerpos de los dos calcinados en el aparatoso accidente ocurrido la noche del miércoles sobre el puente de San Felipe Hueyotlipan siguen sin ser reconocidos. Las graves heridas y la falta de detalles en su identidad han impedido que hasta el momento sean identificados.

Por lo pronto, la Procuraduría General de Justicia confirmó que solamente resultaron heridas siete personas, entre ellos: Jeanina Salas Totolhua, Miguel Ángel Tlacomulco Pérez, Susana López, Miguel Ángel Tlacomulco López, Karla Berenice Pérez, Andrés Merina Guarneros y Gustavo Ortigoza Carrera. Los heridos viajaban en el camión de pasajeros que fue impactado por el camión al caer del puente de San Felipe Hueyotlipan.

El incidente ocurrió alrededor de las nueve de la noche, cuando el vehículo tipo thorton marca Kenworth con placas de circulación 980EES, del Servicio Público Federal, circulaba sobre el bulevar Carmen Serdán, conducido por la persona que actualmente se encuentra en el anfiteatro como desconocido número 39.

Una de las llantas del vehículo se reventó y provocó que el conductor perdiera el control por lo que impactó a un automóvil Volkswagen Bora, modelo 2007 con placas TUS6533, de Puebla. Además chocó contra un Volkswagen Sedán, color rojo, modelo 1991, placas de circulación TTS9833, también de Puebla.

Por último el thorton impactó a un tercer vehículo, una ruta 38, unidad 18 con placas 632705-S. Tal fue la velocidad que tomó el thorton que siguió de largo y cayó del puente, atorándose con cables de alta tensión lo que provocó que explotara la cabina. Tanto el conductor como su copiloto murieron por la explosión. Sus restos terminaron calcinados en el suelo, a un costado del puente y a unos metros de una gasolinera.

Los siete lesionados fueron trasladados al Hospital General Norte, al de Traumatología y Ortopedia del IMSS, así como el nosocomio de la Cruz Roja de Puebla. De acuerdo a la PGJ, ninguno resultó herido de gravedad y por el momento se reportan estables.

Los dos cadáveres, según los detalles del parte oficial de la PGJ corresponden, el primero a un hombre de entre 35 a 40 años de edad, quien conducía y quedó registrado como desconocido número 39; el segundo corresponde a un muchacho entre 16 y 18 años de edad que se mantiene ahora como desconocido número 40.

La causa de muerte fue “intoxicación por monóxido de carbono secundario a calcinación”, según la averiguación previa número 1554/2008 de la Agencia Especializada en Delitos Culposos.

En el rescate de los cuerpos y aseguramiento de la zona, participaron la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, XXV Zona Militar, Protección Civil Municipal, el Heroico Cuerpo de Bomberos, ambulancias del Sistema de Emergencias 066 e incluso personal de la Comisión Federal de Electricidad y Teléfonos de México.

Cabe decir que, según testigos de los hechos, las autoridades no resguardaron al cien por ciento el lugar. Incluso no se advirtió a los operadores de vías ferroviarias y cuando pasó un tren por las vías de la zona volvió a jalar las líneas eléctricas que se encontraban sueltas en el lugar.

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