Cae en SLP líder de célula 'Zeta'

Acusan a Héctor Izar de pagar sobornos a agentes de Río Verde para que operara cártel

Luis Brito / Agencia Reforma

Héctor Izar Castro, tres veces ex director de la Policía Municipal de Río Verde, San Luis Potosí, fue detenido el sábado por policías federales acusado de dirigir una célula de "Los Zetas", brazo armado del Cártel del Golfo, en esa localidad.

Édgar Millán, coordinador de Seguridad Regional y Proximidad Social de la Policía Federal, informó ayer que el individuo, apodado "El Teto", se encargaba de pagar sobornos a policías municipales para que operara la organización delictiva.

Indicó que Izar Castro fue director de la Policía de Rioverde en tres ocasiones, aunque no se especificó en qué años, y entre sus familiares se encuentran ex presidentes municipales.

"Cabe señalar que familiares de él han sido presidentes municipales, tíos, parientes, en diversas ocasiones, estamos tratando de sacar los periodos", dijo el mando federal en el hangar de la Policía Federal en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

Aunque Millán no detalló sus nombres, la Enciclopedia de los Municipios de México registra a Fausto Izar Charre y Eduardo Izar Robles como alcaldes de Rioverde entre 1974 y 1976.

En los periodos de 1989-1991, y 2004-2006, Izar Charre, de extracción priista, repitió como Presidente municipal, y de 1997 al 2000 se registra el nombre de Salvador Izar Noemí.

Izar Castro era buscado por los delitos de cohecho, portación ilegal de armas de fuego de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas, robo a mano armada y venta de droga en San Luis Potosí.

"Se le atribuyen una serie de amenazas contra funcionarios estatales y municipales, además está identificado como encargado de pagar sobornos a policías municipales de Rioverde", dijo Millán.

Incluso, portaba una credencial que lo acreditaba como inspector de la Policía Municipal fechada en 1994.

El ex jefe policiaco fue detenido por elementos federales y del Ejército en calles del Centro del Municipio de Ciudad Fernández, y le fueron asegurados, entre otros objetos, un fusil AR-180 calibre 5.56 milímetros, una pistola y dos revólveres, además de cocaína.

También tres paletas de madera con orificios, que aparentemente utilizaba para golpear a sus víctimas; uno tenía grabada la leyenda "La Lupita" y orificios que formaban una "Z".

"Lo que tenemos de inicio es que con esto golpeaban a las víctimas y la principal función de él era el reclutamiento de policías municipales en el estado", añadió.

El hombre fue trasladado a la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) de la Procuraduría General de la República.