De incapaz tachan al delegado del DIF

Heriberto Hernández Castillo / Corresponsal / Chiconcuautla, Puebla

La presidenta del Sistema DIF municipal de Chiconcuautla, Francisca Hernández Hernández, cuestionó de manera severa la gestión de Daniel Maldonado Cabrera, Delegado Regional del DIF en Huauchinango, porque no conoce las comunidades necesitadas y porque no se preocupa por dotar de manera adecuada las despensas del programa de rescate alimenticio de desnutridos.  

En las críticas se habló del uso que  dio Daniel Maldonado a una silla de ruedas que estaba destinada para un discapacitado de la comunidad de Palzoquitla, municipio de Chiconcuautla, pero nunca llegó, las especulaciones son muchas, “que la vendió por otro lado en 8 mil pesos; que la donó a otra persona preferente; entre otras”.

Resulta que la silla de ruedas es de la mejores, “es una silla que se hace cama, es muy cómoda y está destinada para personas que sufren de llagas en el cuerpo por su discapacidad y entonces esta silla se presta para el aseo personal sin mayores dificultades”, explicó la Presidenta de DIF municipal, pero no llegó a sus destinatario, es una persona humilde del sexo masculino, de edad madura y esperaba que la silla llegara en semanas pasadas, hay versiones de que la silla ya fue entregada a Daniel Maldonado, ésta tiene un valor de alrededor de 14 mil pesos, pero por el momento se desconoce su paradero.

En el tema de la desnutrición pareciera que hay apatía de parte de Maldonado Cabrera, quien como titular del DIF Regional en el distrito de Huauchinango, no ha logrado elevar la atención a las comunidades y cabecera de Chiconcuautla. Hay comunidades que casi su totalidad de infantes están desnutridos, en constaste, de la Delegación del DIF Regional, sólo salen “20 despensas” de un intento de programa de recuperación alimenticia y esto cada 3 meses.

Sumado al tema anterior, Francisca Hernández declaró que, “algunas despensas llegan en malas condiciones, con mordeduras de ratón, en la caja y en algunos productos, como el arroz y el frijol; y claro que esos productos ya no se les da a las familias porque pueden contraer alguna enfermedad”.

Los testimonios dijeron que nunca ha ido a las comunidades con mayor problema de desnutrición como Tlalhuapan, Cuetzalingo, Zempoala, entre otros, por lo que su desconocimiento justifica su actuar como funcionario.