Ni las inmobiliarias creen en La Célula


Dice el líder panista, quien asegura que Pivasa vende porque no hay futuro en el páramo marinista


Para Rafael Micalco la huída de las empresas de bienes raíces es un elemento más para considerar que el segundo macro proyecto marinista no es más que un mito genial de este sexenio.


Selene Ríos Andraca

 

El hecho de que empresas inmobiliarias estén rematando los terrenos vecinos a La Célula es un reflejo de que el macroproyecto marinista no es más que una utopía que terminará en el gran elefante blanco del sexenio de Mario Marín Torres, advirtió Rafael Micalco Méndez, líder estatal del PAN.


En entrevista con Cambio, Micalco Méndez comentó que la huída de las empresas de bienes y raíces que compraron terrenos cuando la administración marinista inició La Célula “es la muestra clara de que nadie cree en el proyecto del recinto fiscalizador”.


Ayer, Cambio publicó que la escasez de inversionistas nacionales y extranjeros para la ejecución de La Célula ha provocado que la especulación inmobiliaria alrededor del recinto fiscalizador se haya derrumbado, puesto que empresas de bienes raíces como Pivasa anuncian en medios de corte nacional y local el remate de terrenos vecinos al mito genial del marinismo. Mediante anuncios en el aviso clasificado, Pivasa oferta terrenos a sólo 10 pesos el metro cuadrado, con la condición de adquirir al menos cinco hectáreas del ‘Rancho las Salinas” a sólo 13 kilómetros del páramo marinista.


El líder estatal panista reprochó que el gobierno del estado haya pagado un peso el metro cuadrado a los ejidatarios del municipio de Oriental y que ahora, las arrendadoras estén vendiendo las tierras en 10 pesos el metro cuadrado y especulando que en un futuro costarán entre 25 y 30 pesos.


“Yo creo que las cifras que se han estado manejando de compra o de venta están fuera de proporción, deja entrever el doble discurso del gobierno del estado, en un tema cacareado por ellos mismos.”


Los precios desproporcionados presumen que en la venta de terrenos hay negocio de parte del gobierno y de sus funcionarios, explicó Micalco.


Y aunque el precio que ofrece Pivasa es caro con respecto al que consiguió el gobierno del estado, es barato en relación al futuro de esas tierras con el prometedor proyecto del recinto fiscalizador, y aún así la arrendadora logrará tener grandes ganancias.


“Habría que ver el precio que compraron el metro cuadrado las arrendadoras, ahora parece que está bajo, que iba a ser un gran proyecto de concentración económica, que iba a dar movimiento a esa zona de produce, creo que quizá, están abandonando el proyecto al hacer este tipo de ventas.”


La Célula, dijo Micalco, no es más que un “elefante blanco hasta el día de hoy porque nada más se dio banderazo de salida, se hizo un gran alborto, pero hoy no hay ningún avance, pareciera que tendrá el mismo destino que aquel proyecto famoso de Ciudad Judicial, tiene todo para ser el elefante blanco de este sexenio”.


A decir de Rafael Micalco, los diputados locales le requerirán al gobierno marinista que informe sobre las empresas que ya se apuntaron a formar parte de La Célula, así como un avance detallado de las inversiones y de los avances.
“No dudo que estén ocultando la información para no evidenciar el fracaso del proyecto.”

 


 
 
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