Está Atlas más vivo que nunca


Atlas se trae de Argentina dos goles de visitante y tiene todo a su favor para definir en casa



Daniel Zazueta / Agencia Reforma

 

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BUENOS AIRES, Argentina, 14-May .- El Atlas se sacó la lotería en su visita a Argentina, pudo haber sido goleado, pero salió vivo y se trajo dos goles como visitante.


Los Rojinegros aguantaron la hostilidad del dragón azul y oro con un escudo de latón, en parte bendecidos por la espada sin filo xeneize, para traerse el 2-2 del José Amalfitani para definir todo en el Jalisco.


La presión de Boca Juniors fue incesante durante todo el partido, los Xeneizes se cansaron de fallar, dejando su afición al borde de la histeria, pero dos instantes de inspiración de los Zorros, al principio y al final, en pelota parada, dejaron todo acomodado a su favor para definir la serie.


Apenas era el minuto 6 y, en un tiro de esquina cabeceado por Diego Colotto, el balón quedó en el aire y Omar Flores hundió el esférico en las redes tirándose de palomita.


A partir de ahí comenzó el vendaval de los argentinos. El empate cayó a los 37', tras una jugada iniciada por Román Riquelme hacia Rodrigo Palacio por derecha, éste centró y Martín Palermo complicó a Hugo Ayala y lo obligó a meter el balón en su propia puerta.


Boca presionaba por ambos costados y volvía locos a los defensas atlistas. Palacio era un torbellino en los desbordes, Riquelme pecaba de precisión en sus centros, pero Palermo no la metía.


"El Loco" se cansó de fallar, un botón como muestra: a los 63' le cayó un rebote y estaba sólo, pero hizo su especialidad, reventarla hacia arriba.


A los 75', Julio César Cáceres, de media vuelta, metió el segundo para Boca tras un cabezazo rechazado de Palermo.
Miguel Ángel Brindisi metió su mejor cuadro, con algunos cambios, le dio la oportunidad a Hugo Ayala, por los problemas musculares de Néstor Vidrio, y metió a también a Christian Valdez.


Al final, el equipo le dio resultados, pues los Zorros sudaron para mantener a raya a los locales, pero tuvieron también su dosis de suerte.


A los 83', el balón hizo crujir el poste, tras un nuevo disparo de Riquelme y, un minuto después, Palermo se perdió el tercer tanto al estilo Marioni, de taquito.


El arquero Jorge Bava también vivió una presión constante y al menos en cinco ocasiones salió avante en sus esfuerzos.
Pero la fortuna coronó de nuevo a los Rojinegros y, a los 88', un recentro de Bruno Marioni le cayó a Jorge Torres Nilo, quien se vistió de gala e iluminó las caras de sus compañeros con la segunda anotación.


Ahora, al Boca le espera la aduana del Jalisco. En Argentina, sólo quedó la postal de unos cuantos aficionados rojinegros, que, como en Guadalajara, le cantaron a los xeneizes el "Cielito Lindo".


 
 
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