Puebla se pinta de arco iris


—crónica—


Cuando la Cucusa se puso más arrabalera fue que pidió disculpas a la presidenta ausente por su léxico: “No vaya a ser que salga como Eva Perón de allá enfrente y me saque de aquí de las greñas.”


FOTOS


Edmundo Velázquez

 

Notas Relevantes

En caída libre la inversión extranjera en Puebla

Reconoce García Ramírez tala ilegal en el Centro Expositor

Notas Anteriores

 

“¡Ay Blanca, discúlpame!”, grita la Cucusa desde el zócalo hacia el Palacio Municipal, por su vulgaridad, el travesti más famoso de la ciudad pide perdón a una presidenta ausente, en pleno Centro Histórico, tras la Séptima Marcha del Orgullo, Gay, Lésbico, Bisexual, Transgénero, Travesti y Transexual.


Y es que a la marcha a la que se le invitó, la presidenta nomás no llegó, pero aún así la comunidad LGBTTT salió a las calles de Puebla una vez más, marcharon desde la 25 Sur y la Avenida Juárez hasta el zócalo de la ciudad para al final entregar reconocimientos a sus trayectorias y héroes.


Precisamente uno de ellos fue Cucusa Minelli, viuda de Labastida, quien hizo el recorrido en un tráiler acompañado de otras divas de su show para llegar al corazón de la ciudad y representar el “New York, New York” de Liza Minelli ante las miradas de hombres y mujeres salidos del clóset, así como de otros tantos gay friendly. Ante los aplausos de la comunidad LGBTTT la Cucusa recibió su reconocimiento y no pudo contenerse las ganas de hacer chascarrillos dignos de Polo Polo, ahí en pleno zócalo.


—¡Hola!— dijo con una voz chillona y afeminada.


Y continuó ahora con una voz más varonil:
—¿Aquí no les he mentado su madre verdad, cabrones?
—¡Nooo!— gritó el público aglomerado en el zócalo.


—¡Pues tomen cabrones!— respondió el travesti con una seña obscena.
Lejos de molestarse, el público le pidió más, como si fuera el show al que los tiene tan acostumbrados en la discoteca Franco’s. Pero cuando la Cucusa se puso más arrabalera, fue que pidió disculpas a la presidenta ausente por su léxico: “No vaya a ser que salga como Eva Perón de allá enfrente y me saque de aquí de las greñas”.
Y es que la presidenta Blanca Alcalá fue la gran ausente, simplemente evadió la invitación que le hicieron las organizaciones no gubernamentales que apoyan la lucha por el respeto de los grupos LGBT y que también difunden los derechos sexuales.


Pero al parecer a la comunidad ni le dolió, ni lo sintió, ni la extrañó. Los organizadores ya lo veían venir y los participantes simplemente se dejaron llevar entre banderas arcoiris y jocosas consignas.

 

¡Oee oee oee oee, soy gay, soy gay!


Esta séptima marcha se vio nutrida, aunque salió como un flaco contingente de unas 300 personas, sobre el camino de la Avenida Juárez fueron ganando adeptos al son del grito: “Banquetera únete”. Los carros alegóricos se vieron vistosos con travestis y drag queens, los albañiles de distintas obras no dejaron pasar a esas exuberantes bellezas sin un chiflido, un “quiero” o un “mamacita”.


Pero también brillaron otras tribus del conglomerado gay como el Grupo Angelosos. “Hombres robustos, velludos, varoniles”, quienes encaramados en una camioneta y montados en un Jetta también desfilaron.


Y qué decir de aquellas que agarraron la avenida Reforma como pasarela, como pasó con Nuestra Belleza Gay Puebla 2007, Yanine Domínguez:


“Es una forma de hacernos presentes, no cayendo en la vulgaridad y nosotros tratamos de sobresalir en eventos de todos tamaños, pero esto, la marcha pues se trata de hacernos presentes, debemos hacerlo.”


Ahí mismo, sobre Reforma, enfrentito de la Secretaría de Gobernación encontramos a Paco Trejo, mejor conocido como La Chesca, o Francesca de las Frutas Secas. El calor del día, de la marcha y lo acalorado de su atuendo dark plástico ya hace mella en su estilo. Se le corre el maquillaje así que busca espejo, pañuelo y sus sombras para el obligado retoque.


“Tengo que llegar perfecta porque en el zócalo voy a hacer un show lésbico con mi criada Valeria…”, dice mientras se retoca. Ya en el templete Chesca y Valeria montarán un dueto de Mónica Naranjo y Mina. “Está muy rica la canción, muy lésbica”, dice Chesca de su número, el cual dio ante unas mil personas que se fueron acumulando entre la avenida Juárez, el Paseo Bravo y la Avenida Reforma.

 

Del show a la marcha familiar


A diferencia de otros años, los organizadores ahora encuentran más diversa y cálida la marcha, más participación de jóvenes así como mayor apoyo de sus familias.


“Son cada vez más los jóvenes que participan, pero también son más las personas mayores que nos acompañan y lo mejor, son más los grupos de heterosexuales que están ayudando y que se unen al trabajo y al reclamo de los derechos”, comenta José Antonio Ruiz Hernández, del centro para las sexualidades Erósfera.


No solamente es el número de participantes o la convocatoria de la comunidad LGBTTT, sino el hecho de que la séptima marcha contó como una de las más cálidas, según consideró Ricardo Baruch Domínguez de la International Aids Society:


“En cuanto a número, pues en promedio puede ser el mismo de personas que se han dado cita en otros años, pero hay muchos jóvenes que están participando, con más ganas, con más fuerza y corazón. Esta marcha se siente mucho más cálida que en años anteriores.”


Además, este año a la marcha se le sumó el mensaje de la historia y lo que personajes de abierta homosexualidad pasaron para dar más lecciones de vida. Entre las consignas de la marcha y las pancartas los jóvenes portaban cartulinas haciendo alusión a personajes históricos como Alejandro Magno, Safo, Frida Kahlo, Andy Warhol, Oscar Wilde, entre otros.

 

 


 
 
Todos los Columnistas