Comando armado balea a judiciales en Tehuacan


PGJ supone que el ataque fue del crimen organizado


Los seis agresores que viajaban en dos camionetas y tres motonetas atentaron en contra de José García Crespo, comandante en Tehuacan de la Policía Judicial, y a otros dos agentes cuando se disponían a llevar a cabo una orden de aprehensión.


Edmundo Velázquez

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Un comando armado compuesto por seis personas que viajaban en dos camionetas y tres motonetas atacó ayer al comandante en Tehuacan de la Policía Judicial (PJ), José García Crespo y a otros dos agentes más cuando se dirigían a hacer llevar a cabo una orden de aprehensión.


Según versiones de los pobladores de Tehuacan el ataque ocurrió alrededor 45 minutos después del mediodía cuando los judiciales circulaban sobre la Avenida de las Palmas en una camioneta Chevrolet Suburban. Al llegar a la esquina de con la Avenida José García Crespo se encontraron con el convoy armado de donde salieron varios disparos de de arma de fuego.


En rueda de prensa Hugo Isaac Arzola Muñoz, jefe de la Policía Judicial, aseguró que en el ataque ninguno de los agentes resultaron heridos, e insistió en que se trató —como el atentado contra el subprocurador Víctor Pérez Dorantes— de una respuesta por el trabajo de los integrantes de la Procuraduría General de Justicia (PGJ).


Sin embargo, la versión de Arzola varió en tiempo, pues aseguró que el ataque ocurrió a las dos de la tarde. Hasta el momento, según el director de la PJ, no se tienen reportes del calibre de armas aunque confirmó que tres impactos de bala quedaron en la camioneta que conducía el comandante García.


“…el calibre que utilizaron estos sujetos esta siendo sujeto a investigación están los peritos en balística para determinar el lugar en donde ocurrieron los hechos y ver si hay casquillos percutidos para determinar que tipo de arma utilizaron”, comentó Arzola. De la detención que habrían de complementar los judiciales Arzola prefirió omitir los detalles “por seguridad de los propios elementos”.


Cabe recordar que en Tehuacan semanas atrás se habló de que Jorge Torres, el jefe de la Policía Municipal había sido amedrentado por presuntos Zetas quienes le exigieron que eliminara retenes, operativos y alcoholímetro. Al respecto Arzola Muñoz no descartó, ni afirmó, que se tratara de delincuencia organizada operando o que el ataque a agentes judiciales tuviera alguna conexión con la banda que amenazó a Torres a finales de julio.


A pesar de esto dijo que se tomaron varias medidas de seguridad y ya Tehuacan está siendo patrullada por miembros del Ejército Mexicano así como otras corporaciones estatales de seguridad.


“Bueno, en este momento desconocemos sencillamente… se trata de delincuentes que bueno reaccionan de esa manera cuando policía judicial reacciona de esa manera cuando policía judicial investiga de cualquier tipo de delito”, comentó Arzola.


—¿No queda descartado el crimen organizado?—se le preguntó en la rueda de prensa.


—Bueno eso, no lo descartamos pero tampoco lo podemos afirmar. 


El jefe de la judicial detalló que el ataque se dio cuando la camioneta donde viajaban los uniformados se mantenía en marcha debido a que “ellos andaban haciendo una investigación y en ese momento fueron interceptados”. De acuerdo a la versión oficial los atacantes escaparon mientras los agentes se parapetaron detrás de su vehículo para evitar más disparos.


Ayer corrió la versión de que dos personas fueron detenidas después del ataque, pero esta información no fue corroborada por la PGJ, tampoco se dieron más detalles de la investigación que presuntamente provocó el ataque.


“…preferimos tenerlo en reserva por que bueno necesitamos determinar realmente que tipo de investigación estaban realizando, allí había algunas personas que habían presentado denuncias anónimas por algunos delitos en particular y era lo que estaba haciendo la policía judicial andaba investigando…” agregó Arzola.


Este es el segundo ataque directo en contra de miembros de la Procuraduría General de Justicia en Puebla, luego de que dos escoltas del subprocurador Víctor Pérez Dorantes fueron heridos al cubrir un ataque que originalmente fue planeado en contra del funcionario por integrantes del brazo armado del Cártel del Golfo.

 

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