Dictan auto de formal prisión a Zetas detenidos

Bajo los cargos de portación de arma de fuego exclusivo del Ejército Mexicano entre otros

Edmundo Velázquez

Lucitania García, juez quinto de distrito en Puebla, dictó auto de formal prisión a los ocho Zetas detenidos en Izúcar de Matamoros por los cargos del orden federal, entre ellos portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército Mexicano, delitos en contra de la salud —en su modalidad de fomento—,  así como delincuencia organizada.

A través de un comunicado de la Procuraduría General de la República se confirmó que los ocho detenidos fueron acreditados como parte de los Zetas, brazo armado del Cártel del Golfo.

En el documento se asegura que los detenidos “declararon haber llegado a dicho lugar para apoderarse de la plaza”, como se indica dentro de la causa penal 46/2008 con la que la juez federal consideró que se acreditan elementos jurídicos suficientes de parte del agente del ministerio público federal por dichos delitos en contra de Juan Carlos Garza Martínez y/o Juan José Olivares Torres alias "El Comandante" o "El Tizoc";  Aurelio Xolo Gascón y/o Javier Ríos Ponciano Ríos alias "El Congo";  Miguel Domínguez Álvarez y/o Juan José Escalante de la Cruz alias "El Tacón"; José Gregorio Loera Ramírez alias “El Gordo”; Mario Antonio Martínez Tovar alias "El Munra"; Juan Martín Salazar Molina y/o Juan Gerardo Salazar Martínez alias "El Llorón"; Rodolfo Espinoza alias "El Popo" y Martín Palma Meneses alias "El Sonrisas".

Además, a Juan Carlos Garza Martínez “El Comandante” le fue fincado un delito más, en contra la salud en la modalidad de posesión de clorhidrato de cocaína con fines de suministro y comercio.

Cabe recordar que los detenidos se hacían pasar como Agentes Federales de Investigación cuando intentaron secuestrar a un presunto pollero, José Vargas Ubaldo, pero fueron detenidos por vecinos de Tlapanalá.

De acuerdo a declaraciones ministeriales de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) en Puebla, los sicarios detenidos buscaron al subprocurador Víctor Pérez Dorantes para que les apoyara en sus actividades ilícitas. Sin embargo el funcionario jamás dio respuesta, por lo que días después sufrió un atentado, al parecer llevado a cabo por los mismos sicarios.

Tras declarar ante el juzgado de distrito hace más de dos semanas, los ocho sicarios fueron llevados al penal de máxima seguridad del Altiplano, ubicado en Almoloya de Juárez, en el Estado de México, donde se mantienen presos.

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