Minimiza el gobierno ola de violencia en la Sierra

Breve recuento de la impunidad

REDACCIÓN / Sierra Norte de Puebla

Aunque el Gobierno del estado ha minimizado la ola de crímenes que se ha registrado en la Sierra Norte, desde que inició el nuevo milenio ha habido secuestros, ejecuciones, robos, asaltos y asesinatos, cuyo común denominador es la permanencia en la impunidad. A la fecha, las autoridades encargadas de la seguridad ciudadana han sido incapaces de inhibir la ola violencia.

Los crímenes se ha cometido contra personas de todas clases sociales, lo mismo les da por asesinar a un trabajador de campo que a un rico ganadero, maestro o profesionista. Uno de estos casos es el homicidio del profesor Juan José Olguín del Valle, quien fue asesinado en Villa Ávila Camacho, en el interior de un bar en el momento en que se encontraba disfrutando con sus amigos un encuentro de futbol. Este crimen no ha sido esclarecido, y las autoridades siguen dando palos de ciego sin poder dar con los autores materiales e intelectuales, pues se quedaron con el primer móvil, el de un crimen pasional, sin que avanzaran en otros sentidos.

Otro asesinato fue el del ganadero Alejandro Hernández Amador (a) “El Becerro”, quien fuera ultimado a balazos por dos sujetos en el momento en que se disponía a comer unos tacos en un negocio ubicado en la avenida Lázaro Cárdenas de Villa Ávila Camacho. Tampoco ha sido aclarado, pese a que cuando Javier López Zavala era secretario de Gobernación, en un evento público que se realizó en el centro de Xicotepec afirmó que ya se tenía conocimiento de quiénes eran los asesinos de Alejandro Hernández, y que en poco tiempo serían detenidos. A la fecha los asesinos del ganadero siguen en libertad, y las palabras del actual titular de la Sedeso se las llevó el viento.

Así como estos asesinatos, son muchos los que se han registrado en esta región en donde los propios ciudadanos han tomado la ley por su cuenta, ya que las autoridades ministeriales no logaran nada, y un caso es lo que sucedió en el municipio de Jalpan, en donde fueron asesinados dos violadores y ladrones que venían azorando la zona, los cuales fueron acribillados a tiros por el padre de una menor de edad a quien violaron cuando se introdujeron a su hogar, y quien al ver que no tenía respuesta de las autoridades estatales, decidió cobrarse por su propia mano.

Otro homicidio es el de Israel Barrios, auxiliar del tesorero de Jalpan, quien fue degollado y arrojado a la orilla de la carretera México-Tuxpan a la altura del kilómetro 128. Hasta hora no existe ninguna línea de investigación, la averiguación previa duerme el sueño de los justos.

En este recuento faltan muchos de los asesinatos que se han cometido en la región y que no se han esclarecido, a éstos habría que agregar los secuestros y ejecuciones; y aun así, el gobierno estatal insiste en minimizar la situación que se está viviendo, argumentando que son casos aislados, pero podrían contabilizarse cerca de 50 personas que han perdido la vida en la zona de manera violenta, sobre todo los municipios de Jalpan, Venustiano Carranza y Xicotepec. 

Copyright 2008 / Todos los derechos reservados para M.N Cambio /