A seis días de que los cerros sepultaran a decenas de personas en al menos tres municipios de la Sierra Norte, las inclemencias en la región no cesan, pues los sobrevivientes de la tormenta tropical Earl ahora deben enfrentar el alza en los precios de la canasta básica y artículos de primera necesidad, los fallos en la energía eléctrica y telecomunicaciones, así como la dificultad de trasladarse a otras comunidades o colonias por los deslaves en carreteras.

Dichas dificultades se presentan con mayor frecuencia en las zonas de Huauchinango, Xaltepec, Papatlazolco, Tlaola y Hueyapan, en estas dos últimas, los puentes que daban acceso a las comunidades sucumbieron ante la fuerza de los ríos para convertirlas en islas de acceso restringido.

Distribución de víveres sólo en albergues

Xaltepec y Papatlazolco, juntas auxiliares vecinas del municipio de Huauchinango padecen desabasto de alimentos. Los tres albergues instalados en la segunda de estas comunidades no han sido suficientes para cubrir las necesidades de la región, luego que el Ayuntamiento adoptara la medida de no proporcionar despensas en las casas.

Las familias como los Pérez y los Orozco que permanecieron en Xaltepec para velar y posteriormente enterrar a sus muertos, sólo han recibido una despensa desde el domingo pasado, la cual está por agotarse y deben caminar casi una hora a Papatlazolco para pedir más alimentos y volver rápidamente por temor a la rapiña.

La única tienda que existía en Xaltepec no da servicio, sin embargo las últimas botellas de Coca-Cola y refrescos que le quedaron se las han ofrecido de buena voluntad a los militares que realizan labores de limpieza en las calles y la búsqueda de Alexis, el pequeño de un año cuatro meses de edad desaparecido en medio de un alud de lodo.

Abarroteros y Walmart hacen su agosto

En el caso de las colonias del municipio de Huauchinango que también sufrieron deslaves, las tiendas de la zona también aprovecharon para subir los precios principalmente en el agua embotellada, ya que las botellas de litro y medio de este líquido pueden costar hasta 25 pesos.

Se han reportado algunos abusos por parte de los comerciantes en el mercado y recauderías, los cuales incrementaron los precios en frutas como la guayaba, el plátano, el mango y la naranja, las cuales presentaban un sobrecosto de 3 a 10 pesos a raíz de la tragedia del fin de semana.

La transnacional Walmart también aprovechó para incrementar sus precios en insumos básicos a través de su sucursal Bodega Aurrera en la cabecera municipal de Huauchinango, donde los clientes se percataron que algunas marcas de leche, papel higiénico y varios perecederos subieron hasta cinco pesos sobre su precio normal, lo cual para una cadena de este tipo se traduce en grandes cantidades.

Sin telefonía celular

La telefonía celular también ha sufrido afectaciones en la región tras los constantes apagones ocasionados por tormentas eléctricas, ya que la señal para llamadas se ha restringido a sólo la cabecera municipal y la banda ancha de datos para el acceso a internet suele bajar la intensidad al menos seis horas al día.

Los sistemas de transporte en la región y los grupos de rescatistas independientes que han realizado la mayoría de los rescates se apoyan de la radio civil (CB) para alertar sobre los deslaves y los hallazgos de personas desaparecidas.