Las negligencias que permitió Álvaro Cabalán Macari como secretario de Infraestructura del gobierno morenovallista en la construcción del Distribuidor Vial de la 31 Poniente, le costarán 9.3 millones de pesos al Ayuntamiento y a la administración estatal, ya que se encargarán de corregir las fallas de la red pluvial y drenaje para evitar las graves inundaciones que se registran en la zona desde su inauguración en 2015.

Después de que presentara un proyecto ante la Comisión de Infraestructura y Obras Públicas para solucionar los problemas del distribuidor y en el que los gastos serán repartidos entre el gobierno municipal y el estatal, Edgar Dávila, director de obras públicas de la Secretaría de Infraestructura Municipal, manifestó que el gobierno encabezado por Luis Banck, se encargará de la pavimentación de cuatro calles que se encuentran en la zona que al llover, generan un desprendimiento de tierra que contribuye a las inundaciones, sin embargo falta definir cuál será la dependencia encargada de liberar el presupuesto para iniciar con los trabajos.

“Se tiene ya autorizado, pero falta definir de qué parte van a salir los recursos, de dónde se van a fondear”, dijo durante la sesión de la Comisión de Infraestructura y Obra Pública.

A pesar de no tener todavía los recursos para comenzar las obras, el funcionario municipal aseguró que ya se encuentran trabajando en la parte administrativa, elaborando el expediente correspondiente a las obras, para iniciar a la brevedad cuando se tenga el dinero disponible.

“Estamos avanzando con el expediente técnico para que al momento en que nos digan que el recurso va salir fondeado de tal parte, nosotros metemos el expediente y comenzamos”, indicó.

Asimismo, aseguró que se mantiene el acuerdo pactado durante la sesión anterior para distribuir los gastos entre la parte estatal y municipal, por lo que será la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento de Puebla (CEAS) u otra dependencia del estado quien se encargue de realizar las perforaciones direccionales.

“El municipio hará la intervención en las calles de la parte alta y el estado a través de CEAS o de obra pública hará las obras de alivio”, declaró Dávila Ramos.

Por su parte, Silvia Argüello, presienta de la Comisión de Infraestructura y Obra Pública, afirmó que el gobierno municipal se encuentra realizando grandes esfuerzos para solucionar la obra a pesar de la incertidumbre del presupuesto.

“Va por buen camino en lo que corresponde a nosotros, pero también falta el esclarecimiento por parte de gobernación”, expresó la presidenta de la Comisión de Infraestructura y Obra Pública, Silvia Argüello.

Cabe mencionar que el costo total de la obra será de 9.3 millones de pesos, por lo que Dávila Ramos indicó que la habilitación de las calles será ‘un gasto fuerte’.