Un año cumplió la tragedia del huracán Earl que dejó 40 muertos en la Sierra Norte de Puebla y apenas la federación construye 100 viviendas, mientras que otras 240 casas siguen pendientes porque no se han autorizado recursos por parte de la Fonhapo y el Fonden, informó el delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Juan Manuel Arroyo.
En entrevista telefónica con CAMBIO, el delegado de la Sedatu informó que fue hace un mes cuando la dependencia tomó la responsabilidad de la reconstrucción de la zona que le tocaba a la federación, por lo que están trabajando con los afectados para conocer quién cuenta con terreno y quién no. Además este primer paquete cuenta con la colaboración de la fundación Corazón Urbano.
“Estamos ahorita en el proceso de haber iniciado 100, llevamos ahora ya iniciadas o construidas en la primera parte en diferente porcentaje 50, estamos aquí resolviendo algunas cuestiones técnicas en cuanto la ubicación de terrenos y esperamos que a finales de septiembre tengamos las primeras 100 terminadas”, dijo el delegado.
Tras el paso de dicha tormenta tropical, la federación junto al gobierno estatal acordaron construir 700 nuevas viviendas para las familias que se quedaron sin hogar, de estas 700, 360 serían realizadas por el Gobierno del Estado, que lleva un avance del 65 por ciento, entregando el próximo 10 de agosto 234. Por otra parte, el Gobierno federal debía hacerse cargo de otras 340, de las cuales 240 podrían tardar, a este paso, años en ser entregadas, pues ni siquiera se aprobó un presupuesto.
“Nosotros estamos esperando el recurso de Fonden, nosotros no hemos tenido respuesta ni tenemos seguridad de cuando podemos tener liberado este recurso. Lo que estamos haciendo es trabajando conforme el programa para que nos vayan liberando recursos Fonhapo (…) estamos levantando la documentación correspondiente a otras 100 viviendas pero no podemos informar que sea oficial hasta que lo tengamos liberado”, dijo el delegado.
Olvidadas, comunidades afectadas de Huachinango
De acuerdo con la publicación del periódico Central, las comunidades de Xaltepec y Chicahuaxtla, pertenecientes a Huauchinango han sido olvidadas por el Gobierno federal. Pues a través de un recorrido donde aportan videos e imágenes, los caminos están destruidos, las escuelas no han sido atendidas y las pocas viviendas construidas fueron en zona de riesgo.
Por su parte, el delegado de la Sedatu afirmó a CAMBIO que es consciente de la necesidad de construir un total de 30 viviendas en la comunidad Chicahuaxtla, donde aún no se ha construido ninguna.
De acuerdo con el boletín de avances Earl, enviado por la Sedatu el pasado 7 de agosto informó que la secretaría de Comunicaciones y Transportes invirtió más de mil 230 millones de pesos para caminos rurales y alimentadoras, a la vez que reconoció que están en espera de 525 millones para su aplicación.
“En acciones de limpieza para causes federales se invirtieron 12.1 millones de pesos del FONDEN en acciones parciales inmediatas del Río Zempoalatongo, que se ubica en la localidad de Chicahuaxtla, Tlaola. En este tema, Conagua al momento tiene en proceso de autorización 21 acciones adicionales lo que equivale a 241 millones de pesos y la población a beneficiar es de 258,090 habitantes”, dice parte del documento.