La empresa extranjera Uber ha encontrado una nueva forma para cobrar su servicio al poner a disposición de usuarios en Puebla, tarjetas de prepago y recarga con el fin de no perder ganancias tras las reformas a la Ley de Transporte.
La empresa lanzó al mercado dos tipos de tarjetas que van dirigidas a sus clientes que no cuentan con una tarjeta de crédito o débito, en las cuales se pueden realizar recargas para poder pagar el servicio.
La primera tarjeta lanzada por la misma aplicación se llama Uber Prepago, que puede ser adquirida en las tiendas OXXO y cuyo costo va de 150 hasta 500 pesos.
El modo en que operan estas tarjetas es de prepago puesto que el monto se abonará a la cuenta Uber del cliente, sin embargo al acabarse el saldo se deberá adquirir otra para poder continuar con el servicio al igual que las tarjetas lanzadas por aplicaciones como Netflix o Spotify.
En un recorrido realizado por CAMBIO en las tiendas de auto servicio se pudo apreciar que aún no se encuentran disponibles las fichas e incluso personal de las mismas tiendas desconocen cuándo será la fecha de llegada de las mismas.
Sin embargo, en redes sociales tanto clientes como socios-conductores han asegurado que la tarjeta de regalo de Uber ya se encuentra en una gran cantidad de tiendas.
También está disponible la Tarjeta Uber-Bankaool
La otra tarjeta que la empresa de servicio ejecutivo puso a disposición es la Uber-Bankaool, la cual cuenta con la participación de Bankaool, que es un banco mexicano en línea y cuyo costo inicial es de 200 pesos.
Este membrete cuenta con un mayor campo de venta pues se puede adquirir en tiendas departamentales como Liverpool y The Home Store, además de Office Depot, Radio Shack y la Comercial Mexicana.
Se puede adquirir en línea con un lapso de entrega a domicilio de cinco a 15 días, y crear una cuenta dentro de la plataforma de transporte.
A comparación de la tarjeta de prepago, con la Uber-Bankaool se puede realizar el pago de distintos servicios.
La semana pasada el Congreso del Estado aprobó las reformas a la Ley de Transporte en las que se dejó a discrecionalidad el cobro del servicio en efectivo pues se indicó que el principal método de pago del mismo deberá de ser por medios electrónicos.
Antes de aprobarse dicha disposición Uber argumentó que prohibir el cobro en efectivo seria discriminar a las personas que no cuentan con ningún tipo de tarjeta, además de que el 86 por ciento de sus clientes pagan en efectivo.