Secuestrado resultó ser secuestrador

La Familia de Gaudencio Moreno denunció que había sido levantado por un grupo armado, pero era la Policía

La Procuraduría General de Justicia presentó ante los medios a cuatro secuestradores

Edmundo Velázquez

La familia de Gaudencio Moreno Ruiz denunció su desaparición en un supuesto secuestro llevado a cabo por miembros de un grupo armado. Sin embargo, Gaudencio, reapareció en la Procuraduría General de Justicia acompañado de otros tres sujetos, todos, irónicamente, acusados por el delito de secuestro y homicidio calificado de un muchacho de 19 años de edad en el municipio de Huaquechula.

Yolanda Irene Yah Cámara, la esposa del secuestrador, levantó la denuncia 3692/2008 en la agencia del Ministerio Público Norte de la ciudad de Puebla asegurando que “hombres vestidos con chalecos antibalas y armas largas” los habían interceptado para secuestrar a su marido. Sin embargo se trataba del grupo de agentes judiciales que iban a hacer efectiva la detención de Moreno Ruiz.

Y es que Gaudencio Moreno participó en el secuestro del muchacho, quien salió de su casa la mañana del 6 de noviembre acompañado de otro sujeto que lo engañó diciendo que quería adquirir su camioneta, marca Ford, tipo Pick-up, color negro, que estaba en venta.

Ese día, a las cuatro de la tarde el vehículo fue encontrado entre terrenos de siembra que de la comunidad de Atzitzihuacan. Vecinos de la zona indicaron que la camioneta estaba en el lugar desde las doce del día.

Más tarde, la familia del muchacho recibió dos llamadas telefónicas donde se les informaba que se encontraba secuestrado y que se debía de pagar un rescate de 3 millones de pesos.

Un día después, el 7 de noviembre, la madre del joven recibió otras tres llamadas para presionarla con el pago del rescate. La señora en respuesta ofreció 2 mil pesos y los secuestradores cortaron la comunicación de tajo. Fue hasta el 9 de noviembre que el cuerpo del muchacho fue encontrado en las inmediaciones del puente conocido como Saladillo, ubicado en la población de Coatzingo. Murió desangrado por las lesiones provocadas por un arma punzo cortante.

Gaudencio Moreno y sus secuaces planearon con anticipación el rapto. Braulio Flores Morales, alias “El Buky” se encargó de contactar al muchacho y le pidió probar la camioneta. Ángel Vázquez Moreno, alias “El Güero” y Jesús Emir Pereyra Padrón, alias “El Chuky” —además de un tercero, aún prófugo— interceptaron el vehículo y llevaron a la víctima a una casa de seguridad situada en Coatzingo.

Gaudencio Moreno por su parte, permitió que Ángel Vázquez Moreno, alias “El Güero” y el hoy prófugo, se instalaran durante dos días en su domicilio desde donde realizaron las llamadas.

Mientras tanto, “El Buky” y “El Chuky”, se encargaron de custodiar a la víctima en la casa de seguridad. El 7 de noviembre la madre del joven les comentó que únicamente había podido reunir 2 mil pesos, por lo que los captores lo llevaron al paraje de Saladillo donde lo mataron.

Detenidos tras las investigaciones, los cuatro sujetos fueron puestos ya a disposición de Alberto Bagatela Bermúdez, juez mixto de Izúcar de Matamoros por los delitos de secuestro y homicidio calificado bajo la averiguación previa PGJ/DIEDO-1/AP74/2008.

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