Ambulantes toman las calles, la policía impide que vendan


Tras varias horas de negociación aceptaron esperar a que la Comuna tenga listo el predio en donde serán reubicados


Mientras algunos vendedores sacaban mercancía, como bufandas, guantes, chamarras, juguetes, entre otros artículos, los líderes caminaban por la calle esperando a que las autoridades municipales se alarmaran ante la amenaza. Alrededor de 200 comerciantes ambulantes acompañaban a los dirigentes de 15 organizaciones


Yonadab Cabrera Cruz

 

Enardecidos, iracundos, molestos y desesperados los vendedores ambulantes intentaron reinstalarse en la calle 5 de mayo, debido a que el ayuntamiento incumplió su promesa de reubicarlos en un predio, a cambio de que liberaran el primer cuadro de la ciudad.  Se veía la ira y desesperación en sus ojos, puesto que llevan 15 días sin trabajar y poco a poco las necesidades los han rebasado: “¡me estoy muriendo de hambre!, ¡mis hijos tiene n que ir a la escuela!”, exclamaron los vendedores informales.


Mientras algunos vendedores sacaban mercancía, como bufandas, guantes, chamarras, juguetes, entre otros artículos, los líderes caminaban por la calle esperando a que las autoridades municipales se alarmaran ante la amenaza. Alrededor de 200 comerciantes ambulantes acompañaban a los dirigentes de 15 organizaciones.


Entonaron en una sola voz, llenos de coraje y desesperación: “¡Ayuntamiento farsante, engañas a ambulantes!, ¡queremos trabajar!, ¡me estoy muriendo de hambre!, ¡el ayuntamiento nos mintió!” Esto, después de que visitaron el predio donde supuestamente serán reubicados, en la avenida 11 norte y 4 poniente. Al llegar allá se percataron de que había una bandera de huelga, y al intentar ingresar al lote, un hombre les impidió el paso.


“No podemos ocupar el área alrededor del predio, porque existe una bandera rojinegra, porque ahí hay un proceso de huelga por algunos trabajadores. Nosotros no podemos llegar y violar ese derecho, ya que su abogado nos dijo que no podíamos interrumpir una huelga porque es delito federal, entonces si nosotros interrumpimos esa huelga los únicos afectados somos nosotros”, expresó María del Carmen García Rivera, presidenta de la asociación 11 de enero.


Incluso, señaló que hasta que el Congreso del estado no declare de utilidad pública el predio de la 11 norte, éste aún será propiedad de los actuales dueños, la familia Matanzo: “Se hizo una declaración de decreto de utilidad pública, de lo cual nosotros no tenemos ningún documento que nos ampare, o que diga que sí. La autoridad no nos ha cumplido y nosotros necesitamos trabajar”.


Además, ante la amenaza de que los ambulantes fueran reprimidos por la policía, la presidenta de los ambulantes enfatizó que la necesidad que tienen es mayor al temor por las represalias, y dijo que demostrarían a las autoridades municipales, así como a la sociedad que saben trabajar.


“Sabemos que la policía viene en camino y que nos van a reprimir, pero sabemos torear, sabemos trabajar con mercancía en la mano y lo vamos a hacer, porque la necesidad es muy grande, los hijos ya entraron a las escuelas y los gastos son muy grandes”.


Al preguntarle si aceptarían ser reubicados en el lote de la Plaza de los Gallos, en la zona de la Capu, García Rivera explicó que dicho predio también está en un proceso legal, pues al igual que la familia Matanzo, el dueño de éste se amparó para impedir que fuera expropiado.


“Mientras no haya un decreto expropiatorio por parte del gobierno del estado, no se puede usar más que por utilidad pública. Aquí debe existir un decreto, donde haya documentación y sea entregado legalmente por la autoridad. No nada más decirnos que ya es de nosotros y que nos vayamos a ubicar y que ocupemos áreas alrededor, porque entonces el problema pasa a otro lugar”.
—¿Con esta situación ya rompieron las negociaciones con el Ayuntamiento?
—Ahora la autoridad que venga a dialogar con nosotros.
—¿Ustedes le pondrán sus condiciones?
—Es que las condiciones ya están vistas, hay necesidad y tenemos que trabajar.

 

Clemente no sabía qué hacer


Clemente Gómez, director de Vía Pública, fue la primera autoridad en llegar a la calle 5 de mayo, para iniciar una negociación con los ambulantes, a fin de evitar que se apropiaran de la vialidad.


Sin embargo, en cuanto arribó a dicha calle fue abordado por los ambulantes, quienes le dirigieron palabras altisonantes y lo calificaron de “mentiroso”, pues no cumplió con el compromiso que hizo con ellos de reubicarlos, mientras que ellos argumentaron que cumplieron “al pie de la letra” el acuerdo que signaron con el Ayuntamiento hace meses.


Ante las diversas ofendas que los vendedores informales hicieron en su contra, el director de Vía Pública se puso nervioso y, desesperado, nada de lo que decía a los ambulantes los calmaba y al contrario los molestaba más.


Por esta razón, y hundido en la confusión y angustia, solo pudo explicar: “nosotros hemos hablado con ellos en repetidas ocasiones, hasta el día de hoy habíamos tenido pláticas y acercamientos con ellos, la situación legal del predio está basada en la sindicatura. Esta área es la que lleva las negociaciones con la familia Matanzo para el predio, habíamos dialogado con ellos para que de alguna manera esperaran el decreto expropiatorio, para poderlos ubicar dentro del predio”.


Al auxilio de Clemente Gómez llegó el director de la Policía Municipal, Carlos Cárdenas Ramírez, quien de inmediato puso a custodia de la policía municipal, elementos de la policía estatal y el grupo Delta, la calle 5 de mayo, de la 6 poniente- oriente, hasta la 12 oriente-poniente, y ordenó que por ningún motivo dejaran que se instalarán los ambulantes.


—¿Tienen que retirarse? —ordenó Cárdenas Ramírez a la líder de los ambulantes.
—No nos vamos a quitar.


Después de cruzar palabras con el director de la policía Municipal, la líder de los comerciantes informales decidió visitar al secretario de Gobernación Municipal, Javier Casique Zárate, por lo que los 200 ambulantes que participaron en la protesta la acompañaron y bloquearon la avenida 2 norte a la altura de las instalaciones de esta dependencia.

 

Hay un bache en las negociaciones: Casique Zárate
En su reunión con los ambulantes, el titular de la Secretaría de Gobernación Municipal, Javier Casique Zárate, reconoció que las negociaciones entre estos comerciantes y el ayuntamiento se estancaron: “esto es solo un bache dentro del proceso de reubicación y la expropiación del predio”.
Además, aseguró que el centro histórico no está en negociación, y no entrarán en los tratos que haga la comuna con los ambulantes. Pero a cambio de evitar problemas, Casique Zárate ofreció una tregua a los vendedores ambulantes y les pidió paciencia, para que no tomen las calles del centro histórico, en tanto se define la situación del predio de la 11 norte y 4 poniente, es decir, hasta que quede listo el decreto de expropiación del lote.
A cambio de esta tregua, los comerciantes pidieron la oportunidad de instalarse en otras zonas de la ciudad para vender su mercancía, incluyendo mercados, tianguis o en la zona conurbada de la ciudad.
Finalmente, después de concluir con esta negociación, el secretario de Gobernación enfatizó: “gracias a nuestra oportuna intervención, evitamos un baño de sangre”.

La administración de Enrique Doger fue rebasada por la situación: Canacope

El presidente de la Canacope, Álvaro Ramírez Ramírez aseguró que la administración del alcalde Enrique Doger Guerrero fue rebasada por el problema de los ambulantes, y como ya está de salida no le ha tomado la seriedad que merece la situación.
En entrevista, el empresario manifestó que la gestión de Doger Guerrero está más preocupada por entregar cifras positivas sobre el trienio que está a punto de concluir, que en dejar un centro histórico ordenado a futuro.
Además, especificó que este problema el Ayuntamiento lo tenía que haber resuelto desde hace tiempo, y no a menos de un mes de que se haga el relevo de autoridades municipales.
Asimismo, indicó que los líderes de los ambulantes no tienen argumentos sólidos para exigir una reubicación, debido a que prometieron que no regresarían a las calles del centro histórico y ahora pretenden retornar.
Precisó que el argumento que dan los ambulantes con respecto a que necesitan vender su mercancía en vía pública no es válido, pues llevan años vendiendo en las calles del centro histórico y no han hecho nada por arreglar el problema con las autoridades en turno.
Aunque dijo que la violencia no es buena, porque provoca miedo e inseguridad, además de que se afecta a diversos sectores de la sociedad, mencionó que el Ayuntamiento reubicará a los vendedores informales a como dé lugar.

 

 


 
 
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