El Ejército detuvo a Alfredo Beltrán Leyva, "El Mochomo", considerado uno de los principales operadores de Joaquín "El Chapo" Guzmán.

Este es el primer golpe importante que el Gobierno de Felipe Calderón propina a la estructura del Cártel de Sinaloa.

Hasta ayer, el grueso de capos capturados por las autoridades federales pertenecían al Cártel del Golfo, que encabezó Osiel Cárdenas Guillén.

Beltrán Leyva fue detenido en Culiacán, Sinaloa, junto con tres miembros de su equipo de seguridad, identificados como Javier Hugo Urquiza Inzunza, Flavio Manuel Castro León y José Uistecingo Barraza.

Se le acusa de los delitos de narcotráfico, delincuencia organizada, secuestro y posesión de armas de fuego exclusivas para las Fuerzas Armadas.

Los presuntos narcotraficantes fueron detenidos por tropas de Fuerzas Especiales y efectivos de Novena Zona Militar, con sede en Culiacán, dio a conocer el General Luis Arturo Oliver, subjefe Operativo de Estado Mayor de la Secretaría de la Defensa Nacional, en conferencia en el hangar 1 de la PGR.

Acompañado de Noé Ramírez Mandujano, subprocurador de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) de la PGR, el General Oliver indicó que al momento de ser detenidos, los integrantes del Cártel de Sinaloa portaban un fusil AK-47, ocho armas cortas y dos maletas con unos 900 mil dólares.
Los sujetos, agregó el mando militar, viajaban a bordo de una camioneta BMV X3, en la que también se encontraron estuches con 11 relojes finos.

Alfredo Beltrán Leyva es parte de la estructura de ese Cártel junto con sus hermanos Héctor, Marcos Arturo, Mario y Carlos.

Parte de las supuestas funciones del "Mochomo" consistían en dirigir las operaciones de transporte de droga, lavado de dinero y el pago de sobornos a funcionarios para facilitar las acciones del Cártel.
Operaba en Sonora, Chihuahua, Sinaloa, Durango, Jalisco y Nayarit, según la PGR.

También informaron que tenía a su cargo ejercer el control de los grupos de sicarios conocidos como "Los Pelones", en Guerrero, y "Los Güeros", en Sonora.

Los detenidos fueron trasladados ayer en un avión de la Fuerza Aérea Mexicana a la Ciudad de México. Posteriormente se les trasladó al Penal de Alta Seguridad del Altiplano, en el Estado de México.
En un comunicado, el Embajador de Estados Unidos en México, Tony Garza, afirmó que la detención también beneficia a su país, por lo que felicitó al Gobierno mexicano.