Es ataque celeste una incógnita

León Lecanda / Agencia Reforma

 Luego de la dudas que generó el Cruz Azul en la derrota ante el Atlas, Sergio Markarián tendrá 10 días para definir el once que encarará la Liguilla.

Durante la campaña, el técnico uruguayo se enfrentó cada jornada a distintas complicaciones: las lesiones de Miguel Sabah y Édgar Andrade, la gastroenteritis de Nicolás Vigneri, las convocatorias al Preolímpico de Andrade, César Villaluz y Julio César Domínguez y las suspensiones de seis juegos a Sabah y Vigneri.

La zona de ataque fue la más perjudicada, y aunque los dos delanteros elegidos por Markarián para ser titulares (Sabah y Vigneri) no jugaron de la Fecha 11 a la 16, paradójicamente la Máquina logró hilvanar cinco victorias y sufrir sólo una derrota en ese periodo.

Pero cuando parecía que Cruz Azul podría romper su récord de triunfos al hilo en torneos cortos y llegar de la mejor forma posible a la Liguilla, el haber recuperado al plantel completo parece haberle traído más preguntas que respuestas al técnico celeste.

Ni Sabah ni Vigneri pudieron entrar en ritmo tras un mes y medio de ausencia, y sus compañeros que venían actuando regularmente y quienes ingresaron de cambio, Pablo Zeballos y Gerardo Lugo, tampoco se vieron tan sueltos como en otros juegos. Villaluz salió del partido por decisión técnica y Andrade no tuvo la picardía de otras veces.

"Yo les confieso que al principio pensé hacer jugar sólo a uno de los dos pero después me pareció un poco injusto, sobre todo en el caso de Miguel, siendo el goleador tradicional del equipo en los últimos años y el goleador en este campeonato", señaló el estratega.

"Cruz Azul no jugó tan mal pero equivocó los caminos del gol, eso es indudable. En fin, nos vino bien porque apreciamos cosas, pusimos los pies sobre la tierra".

Cruz Azul espera a Jaguares, Necaxa o Monterrey en Cuartos, donde Markarián decidirá qué jugadores harán frente no sólo a su rival en la cancha, sino al fantasma de más de 10 años sin conseguir un título.