"'Olvídalo', te dicen. Pero tienes que sentirlo para curarlo y llorarlo para dejarlo. No guardes tu dolor. Déjalo salir. Grita si tienes que hacerlo. Cuando te guardas el sufrimiento, el dolor se queda dentro, como veneno. Durante años, incluso. Déjalo salir, te sentirás mucho mejor. Las lágrimas son oraciones líquidas", escribió en la red social, para después, tras recibir respuestas de agradecimiento de los 'beliebers', añadir: "Me encanta cuando me llamáis mamá. ¡¡Yo también os quiero!! Abrazos".
Quien probablemente se haya aplicado los consejos de Pattie es su hijo Justin Bieber (20), quien decidió que disculparse era lo mejor para calmar la controversia creada hace unas semanas tras la publicación de dos vídeos en los que, siendo adolescente, contaba chistes racistas.
"Al final de todo tengo que dar la cara y responsabilizarme de lo que hice. Ver los fallos cometidos hace años ha sido una de las cosas más duras a las que me he tenido que enfrentar. Pero creo que tengo que asumir esos errores y no dejar que queden ahí", explicó Bieber en un comunicado.