El año 2020, que por la pandemia obligó al confinamiento domiciliario, provocó que se disparan los delitos de violencia familiar con un total de 10 mil 150 denuncias, representando un aumento de 5.3 por ciento a comparación del 2019, siendo los meses de marzo, abril y mayo cuando más se registraron dichas agresiones en la entidad poblana.
De acuerdo con un comparativo realizado con datos de la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE), tan sólo en el año 2020 se registraron un total de 10 mil 150 denuncias por delitos contra la familia, es decir, 511 más que las emitidas en el año 2019.
Además, durante los 12 meses del año anterior el rango de denuncias registradas por este tipo de delito no descendió de 772 casos que se suscitaron en el mes de septiembre, mientras que la cifra más baja en el año 2019 fue de 543 casos originados en el mes de enero.
En cuanto el mes de marzo, que fue el inicio de la contingencia por esta enfermedad, fue el mes en el que se dispararon los casos de delito contra la familia, con mil 85 denuncias contabilizadas; en segundo lugar se colocó el mes de julio, que representó el pico de la pandemia, con 876 casos; y en tercer lugar el mes de agosto, justo cuando se dio la reactivación económica, con 832 denuncias.
Por último, el año 2020 cerró con 816 denuncias realizadas por violencia intrafamiliar, aunado al segundo confinamiento domiciliario, las fiestas decembrinas en casa y la cancelación de reuniones por el incremento de contagios por el virus, mientras que en el 2019 únicamente fueron contabilizadas en el mismo mes 794 casos.
Vale la pena señalar que desde que llegó a la República Mexicana la pandemia por el coronavirus y se registró el primer caso de esta enfermedad en la entidad poblana, las autoridades federales y estatales lanzaron una serie de estrictas recomendaciones, entre ellas el uso obligatorio de cubrebocas y el famoso Quédate en casa.
Sin embargo, a pesar de que mujeres y niños supuestamente permanecieron seguros en sus hogares para no adquirir el virus, no pudieron librarse del maltrato físico y psicológico que se desataba en el propio núcleo familiar, dejándolos sin escapatoria.
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Fernanda Escobedo
@mf_escobedo