El comerciante asesinado por la mañana del lunes en inmediaciones de la Central de Abasto, tenía 25 años de venir a comprar a Puebla, se llevaba hasta 2 torton cargados de abarrotes, frutas y verduras los días lunes y viernes para comercializarlos en Guerrero, estado del que era originario.
La atroz escena fue presenciada por su hijo, quien vio cómo su padre de 45 años de edad era perforado por las balas.
Como cada semana, Mario Guevara Lázaro acudía a la Central para abastecerse de mercancía, misma que trasladaba y vendía en Guerrero, lugar al que ya no volvió con vida, ya que metros antes de llegar al centro de abastecimiento la muerte lo sorprendió.
A bordo de su camioneta tipo redilas fue ejecutado a balazos por sujetos desconocidos, quienes le dispararon en cuatro ocasiones en el pecho, lo que provocó que falleciera de manera casi inmediata.
De acuerdo a comerciantes entrevistados de la Central de Abasto, lo recuerdan como alguien trabajador, alegre y dispuesto a superarse, una persona que aún tenía una vida por delante y que lamentablemente le fue arrebatada cuando iba por mercancía para seguir trabajando.

Karla Hernández
@KarlaDaH