La noche del sábado 2 de abril, se realizó una ‘fiesta clandestina’ en Rancho Blanco, de Atizapán de Zaragoza. En el que un joven de nombre Hugo Carbajal asistió, pero dentro del lugar, aseguran que comenzó a correr y bailar sin control, por lo que el guardia del salón lo trató de detener rompiéndole una botella de cerveza en la cabeza, para después picarle en el cuello.
Ante los hechos violentos, Hugo perdió la vida tras la lesión cortante en cuello, en el que amigos y familia han iniciado con diversas acciones para exigir justicia por el asesinato.
Hugo Carbajal era un joven de 15 años que le gustaba acompañar a su madre, Maureen Amaro Fernández, a manifestaciones en México. Además, le gustaba jugar futbol y practicar deportes.
Su familia y amigos lo despidieron con dolor, pero decidieron vivir su luto organizando una manifestación en Periférico Norte, para exigir la detención del presunto asesino de Carbajal.
Fue una protesta que colapsó el poniente del Valle de México con el bloqueo total de esta vía por 14 horas y parcial por tres horas más hasta las dos de la madrugada del miércoles y que ahora se mantiene solo en la bahía de ingreso al Parque Naucalli sin obstruir la circulación.
La mamá, junto con familiares, han pasado la noche en Periférico, como parte de la protesta, señalando que amigos de su hijo fallecido han compartido información del presunto asesino, por lo que espera que las autoridades den más pronto con su detención.
“Si los chicos ya saben dónde vive y dónde se mueve el homicida, confío en que las autoridades lo detengan pronto y se haga justicia”, reiteró Maureen.
Cabe resaltar que se han difundido imágenes del responsable de la muerte de Hugo, así como de la persona que lo ayudó a escapar para no ser detenido.
Información obtenida de: El Universal
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Redacción Diario CAMBIO
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