Ángel Ramírez Villegas de 21 años es un chivo expiatorio de la Fiscalía General del Estado, así lo considera su familia debido a que fue detenido bajo engaños, acusado de narcomenudeo; actualmente está preso en la cárcel de San Miguel, todo porque el dueño del domicilio que rentó tenía una orden de aprehensión vigente.
En entrevista para CAMBIO, Fabiola Ramírez hermana de Ángel narró que su hermano menor fue detenido de manera arbitraria la madrugada del pasado 12 de abril, cuando aún se pudo comunicar con ellos para informarles que unos policías estaban entrando a la casa donde está el cuarto que rentaba.
Con rabia, Fabiola narró que de un momento a otro su hermano soltó el teléfono y se escuchó que le decían: “las manos al piso”.
Desesperados se reunieron como familia e inmediatamente se dirigieron a la casa donde Ángel rentaba un cuarto ubicado en la colonia Loma Bonita Caleras, pero no los dejaron pasar y les informaron que tenían una orden de aprehensión la cual ni siquiera estaba a nombre de él.
Ahí, unos agentes se les acercaron y les informaron que se llevarían a Ángel a declarar por protocolo y posteriormente estaría de regreso en su casa, sin embargo esto nunca ocurrió y una hora después Ángel logró comunicarse con sus hermanos para informarles que sería enviado al C5 porque estaba siendo acusado de delitos contra la salud, es decir narcomenudeo.
“A Ángel quien lo detiene, indica que tiene un paquete enrollado con cinta canela, que a la hora de su detención según mi hermano avienta el paquete, vimos las fotografías y donde según pasó, ni siquiera es su cama ni su cuarto que renta, además no concuerda, porque supuestamente lo encontraron con el paquete cuando en realidad mi hermano nos llamó avisándonos que estaban entrando a su casa unos policías, tenemos el registro de llamadas”, dijo Fabiola.
Fabiola reveló a este medio que en el momento en el que se llevaron a Ángel estaban ahí los dueños de la propiedad, pues la orden de aprehensión y cateo era contra su casero; además refirió que ellos les dijeron a los ministeriales y a los estatales que no se lo llevaran detenido y que no tenía nada que ver pero, hicieron caso omiso.
“Ninguno de mis hermanos tiene antecedentes, ni se junta con banditas, no somos delincuentes, la orden de cateo y de aprehensión viene de Tehuacán nada que ver con Ángel, nosotros vimos a mi hermano hasta el otro día a las 7:30 de la noche y ahora está preso en el Penal de San Miguel”, dijo.
Este martes será la audiencia de vinculación a proceso de Ángel
Este martes será la audiencia de vinculación a proceso en contra de Ángel, su hermana Fabiola dijo a CAMBIO que cuando se llevó a cabo la primera audiencia el pasado jueves se determinó como legal su detención, sin embargo la abogada que ellos contrataron solicitó la ampliación del plazo constitucional de 144 horas para aportar pruebas que puedan demostrar su inocencia, por lo que esperanzados esperan que hoy Ángel pueda volver a reunirse con ellos.
“Mi hermano no tiene antecedentes penales, el sólo se dedica a su negocio, ya no pudo seguir estudiando porque mi mamá enfermó de cáncer y hace año cinco meses falleció, ella le heredó el negocio de la pollería en el cual mi hermano está atendiendo, es el dueño, su único error fue caer en ese departamento, él sólo lo rentó”, lamentó Fabiola.
Finalmente, la familia de Ángel Ramírez espera que la juez de control que lleva el caso sea justa con lo que estará próxima a determinar, pues ellos confían en que las pruebas que han recabado demuestren que su hermano es inocente. Sin embargo este no es el primer chaleco fabricado por las autoridades, principalmente elementos de la Policía Estatal, pues un caso similar vivieron Leslie Alcántara y sus amigas cuando fueron detenidas arbitrariamente en enero.
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Fernanda Escobedo
@mf_escobedo