Este miércoles se cumplen 15 días desde que la pareja de Joselin y David fueron reportados como desaparecidos después de dirigirse al tianguis de La Cuchilla a comprar mercancía. En este tiempo sus familiares con sus propios recursos han recorrido más de 10 colonias en la ciudad repartiendo boletines, siendo su única esperanza con la que puedan volver a casa sanos y salvos.
Don Álvaro Báez, padre de David dijo a Diario CAMBIO que ya no saben qué más hacer para poder localizar a su hijo y a su nuera lo más pronto posible, pues hoy se cumplen exactamente dos semanas desde que ellos salieron de su casa en San Bartolo, y no hay ni siquiera un avance en concreto que pueda ayudar a su búsqueda.
Joselin y David son un matrimonio joven de 28 y 29 años respectivamente y las últimas imágenes que se tienen de ellos fueron el mismo día que desaparecieron, indicando que estaban en el paradero del RUTA, esperando una alimentadora para que los llevara a su destino, estaban juntos.
Es por ello que su familia tiene la seguridad de que algo les sucedió, pues el ir al tianguis La Cuchilla no era algo nuevo para ellos, constantemente iban para allá para surtirse de mercancía y poderla vender al sur de la ciudad.
Ahora la única esperanza de la familia está programada para el próximo viernes 17 de junio, pues la Fiscalía los citó para que les pudiera dar algunos avances que ellos recabaron en torno a la desaparición, por lo que confían en que puedan esclarecer el caso.
La lucha de la familia que ha caminado para encontrarlos por toda la ciudad
Desde el momento en el que Joselin y David fueron reportados como desaparecidos, su familia ha estado luchando constantemente en encontrarlos y desde sus posibilidades han mandado a hacer más de mil boletines de búsqueda para repartirlos a pie en diferentes colonias de la ciudad de Puebla.
Don Álvaro refirió que han recorrido zonas como el Centro de la capital, el Carmen, Analco, San Ramón, la CAPU, La Fayuca, el Mercado Hidalgo, La Loma, la Ciénega, Bugambilias, la 11 Sur y la Diagonal y algunos otros familiares han andado por su cuenta por rumbos como El Cobre, Pueblo Nuevo y otras colonias donde ellos habitan.
Sin embargo, entre más pasan los días más ha incrementado su preocupación, principalmente en su pequeña hija de 5 años que está muy angustiada por sus padres, pues con frecuencia ha preguntado por ellos y su tristeza ha llegado al grado de que ya ni siquiera querer comer.
Fernanda Escobedo
@mf_escobedo