Viernes, 26 de Julio del 2024
Martes, 16 Febrero 2021 01:39

Entre depredación e indiferencia

Entre depredación e indiferencia Escrito Por :   Silvino Vergara

«[…] son también, tiempos de depredación ideológica, que despoja nuestra mente de todo referente crítico, analítico que mueva el verdadero cambio, que amanece al status quo». Alejandro Solalinde Del prólogo


 

Entre depredación e indiferencia (Vergara Nava, Silvino, Puebla, 2018) parece ser como se desenvuelve la sociedad actual. Algunos asumen la primera de las posiciones: depredar, que no es la vieja concepción del hombre libre, que debe ser protegido por el Estado y por el derecho para que realice contratos, acuerdos y convenios de buena fe para obtener un lucro permitido, sino que este sujeto actual asume la posición del despojo, de la rapiña con sus semejantes, a veces bajo esa máxima que gritan a viva voz «¡ganar, ganar!» y que, en realidad, es «¡depredar, depredar!». Esos sujetos depredadores fueron formados por ese sistema económico, político, filosófico actual, que consiste en el denominado «capitalismo financiero», el cual es el contraste del capitalismo productivo; pues el actual es totalmente especulativo y sus fines son, precisamente, saquear (y esto se encuentra en todas partes, en los ámbitos políticos, empresariales, comerciales, universitarios, laborales, estudiantiles). Por ello, los delitos más graves en nuestro marco social son el peculado, el abuso de autoridad dentro de la administración pública, el lavado de dinero en el sector privado, la defraudación fiscal y el contrabando. Por ello, el homicidio, el robo, la violación se están convirtiendo en delitos de menor importancia, cuya consecuencia, en parte, es lo que observamos en las calles y en la sociedad: «estamos acostumbrándonos a caminar entre los muertos».

 

La otra posición es la indiferencia que asume la gran mayoría de la población y que lleva a ver pasar las cosas, desde los delitos (como secuestros, desapariciones) hasta las precariedades (como desempleo, injusticias callejeras), sin que nos inmutemos en tanto no nos afecten directamente, no nos traigan consecuencias ni dé de qué preocuparnos más que «andar con más cuidado»; con lo que asumimos la mejor posición del desentendimiento de la realidad. La indiferencia es la mejor forma de no afrontar los problemas que nos encontramos todos los días, de evitarlos. Por ello, se sufre un ambiente generalizado de «mejor no leer ni ver las noticias», de aislarnos de la realidad; para lo cual está la tecnología de la información, cuyo resultado —entre otros— hace que «conozcamos» mejor a personas que se encuentran en otros países que a nuestro vecino o compañero de trabajo.

 

Evidentemente, la indiferencia es lo peor que le pudo pasar a la humanidad. Las generaciones anteriores que han luchado y dado sus vidas para lograr derechos que hoy observamos con mucha naturalidad, ahora están perdiendo esa victoria con la indiferencia de la sociedad de hoy en día. Esos derechos que ya se habían logrado, como es el caso de los derechos a la intimidad y a la privacidad, hoy son vulnerados por medio de la tecnología de información. La generación de 1968, que logró, hace 50 años, un país con un gobierno menos represor, una mayor participación de la ciudadanía, apertura en la libertad de expresión, vería cómo hoy se van perdiendo sus logros por la indiferencia en que nos encontramos.

 

Entre depredación e indiferencia es un libro que consiste en una recopilación de ensayos de los últimos cuatro años, catalogados en cuatro capítulos: «El poder de los derechos», «El poder de la realidad», «El poder de recaudar» y «El poder de castigar», así como con un apéndice que se pregunta «¿Habrá una filosofía del derecho de América latina?» atendiendo a la problemática que se vive actualmente en toda nuestra región, donde las instituciones jurídicas que nos han implementado son, más que nada, imposiciones de la centralidad de Europa y Norteamérica, sin que sean instituciones propias para abatir los problemas que a nosotros nos atañen.

 

El prólogo es magistralmente elaborado por el presbítero y activista social Alejandro Solalinde, de quien citamos textualmente: «Después de leer este trabajo de investigación, los lectores tendrán una información completa de la manera de cómo nos han estado mal gobernando […], se quedará con muchas pistas para construir el México libre, seguro, justo, igualitario e incluyente que queremos y nos han impedido alcanzar». Finalmente, esta obra Entre depredación e indiferencia (en la portada) cuenta con una pinta como muchas que hay en los suburbios de las grandes ciudades, la cual reza: ¿Por qué tanto miedo de educar al pueblo? (Correo electrónico: consultas@ccapuebla.com; web: parmenasradio.org).

 

Google News - Diario Cambio