Desvío de recursos, inseguridad rampante, cero apoyos para el turismo y un sinnúmero de irregularidades son el sello característico de la administración de Gerson Calixto Dattoli en el bello Pueblo Mágico de Cuetzalan.

A lo largo de tres años, que están por concluir, y muy seguramente durante los próximos tres, en los que cumplirá su período de reelección que logró increíblemente, el único beneficiado por Gerson Calixto es su ‘delfín’, Juan Manuel Téllez Salazar.

Y aquí mis querides lectores les explico por qué:

Todas las obras públicas, muchas o pocas, que se hicieron en los últimos tres años durante el gobierno de Calixto Dattoli fueron adjudicadas a la empresa fantasma ¿de quién cree?... claro, del ‘delfín’ Téllez Salazar, quien además es el director de Obras Públicas de Cuetzalan del Progreso, ¡faltaba más!

Que si el tope, que si la escuelita, que si los baches, que si los caminos rurales… todo, absolutamente todo, fue facturado por Juan Manuel Téllez en favor de Juan Manuel Téllez, claro, a través de sus prestanombres.

Por si fuera poco, llegado el momento de las definiciones para el pasado proceso electoral, Juan Manuel Téllez se apuntó para competir por la Presidencia Municipal de Tlatlauquitepec, de donde es originario y en donde se desempeñó entre 2014 y 2018 como director de Obras Públicas durante la administración panista de Ángel Guerrero (este último de muy mal recuerdo entre la gente de dicha demarcación).

Y bueno, el problema no fue que Juan Manuel Téllez compitiera por el municipio en el que nació, creció y (se) sirvió como director de Obras, el problema fue que el financiamiento de su campaña salió de las arcas de Cuetzalan del Progreso.

Gerson Calixto aplicó el típico “dos para mí, uno para ti; cuatro para mí, dos para ti”, o sea, el presidente municipal de Cuetzalan saqueó los recursos de este Ayuntamiento para financiar su campaña, pero como ‘buen cristiano’ para patrocinar la campaña de su ‘delfín’ en Tlatlauquitepec.

Total que gracias al reguero de dinero (público) que hizo Gerson Calixto por Cuetzalan, logró conseguir la reelección.

Sin embargo, la fórmula no funcionó en el municipio vecino de Tlatlauquitepec, en donde Juan Manuel Téllez regaló dinero (público) a más no poder, pero finalmente terminó perdiendo contra un viejo lobo de mar (por no llamarlo cacique), como es Porfirio Loeza Aguilar.

Actualmente, Juan Manuel Téllez regresó a su cargo en el gobierno de Gerson Calixto, en donde seguramente continuará los siguientes tres años llenando sus bolsillos de dinero público a través de empresas fantasmas.

Además, Téllez Salazar deambula por Cuetzalan, Tlatlauquitepec y hasta por la capital de Puebla esperando que un alma se apiade de él y anule la elección que perdió, incluso emprendió una campaña en medios para desacreditar al ya desacreditado Porfirio Loeza, pagada obviamente con recursos del Pueblo Mágico donde gobierna su patrón Gerson Calixto.

Y oooobviamente las consecuencias de las ambiciones y el desvío de recursos de ‘El emperador’ Gerson Calixto y su ‘delfín’ Juan Manuel Téllez las pagan ni más ni menos que la gente de Cuetzalan.

Y si no me cree basta ver lo que pasó la madrugada del domingo, cuando Eusebio Esteban, un trabajador del Rastro del municipio de Cuetzalan, fue ejecutado cuando viajaba a bordo de su automóvil…

¿Y la Policía de la demarcación? Ni sus luces, nunca llegó.

¿Por qué? Porque ‘El Emperador’ Calixto cortó todo el recurso para llenar de gasolina las patrullas, porque ‘ya no hay’ dinero. Y cómo no, si se lo acabó en su campaña y en la de su ‘delfín’.

Pa’ no dejar

Qué oso y qué vergüenza. Repito. Qué oso y qué vergüenza usar montajes para poner tu cara en el cuerpo de un artista, cantante, famoso o quien sea. Pues eso hizo el político poblano de las tres F’s (fantoche, falso y fanfarrón), Alejandro Armenta, quien durante el fin de semana publicó un video en el que montó su rostro sobre el cuerpo de Tom Cruise en escenas de la película Top Gun.

Seguro, en su sueño de ser gobernador del estado y con eso de que le gustan los montajes, para fantasear, el senador ya montó su cara en el cuerpo de su amado padrino, el ex gobernador Mario Marín.

Es todo por hoy, quedé asqueado con ambos montajes armentistas. Nos leemos en la próxima Estocada, recuerden que me encuentran en:

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