La guerra civil que se vivirá al interior de Morena en Puebla traerá daños colaterales a otros partidos, principalmente al PRI, que seguramente terminará por ser desfondado y podría alcanzar también al PRD, aunque dicho instituto político prácticamente es un cadáver en la entidad.

Para nadie es un secreto que en la entidad poblana y gracias a los oficios del gobernador Miguel Barbosa el tricolor es un aliado más del gobierno estatal y eso significa que también lo es de la 4T poblana. Basta ver el Congreso local donde la bancada priista es total sumisión a los designios de Casa Aguayo. Con los presidentes municipales del PRI las cosas son exactamente iguales

Por ello, con la apertura del proceso de afiliación en Morena desde el pasado 1 de julio los legisladores y ediles del tricolor jugarán un papel importante sumando a sus huestes a la 4T para poder sacar adelante a los candidatos del barbosismo, primero para la definición del Consejo Estatal y sus 150 integrantes, para después, con una mayoría dentro de dicho órgano, obtener la dirigencia estatal.

Ya saben lo que se dice, en la guerra y en el amor todo se vale, y la lucha por la dirigencia estatal de Morena es precisamente una guerra civil entre los morenistas de todos colores y sabores.

Además, no es nuevo que los priistas apoyen a un candidato o candidatos de otros partidos. Ya lo vimos en el proceso interno del PAN en donde se denunció que Genoveva Huerta estaba siendo apoyada por ediles del PRI, principalmente en la Sierra Norte.

El verdadero problema va a ser que al ingresar a las filas de Morena a cientos de priistas, el ‘expartidazo’ en Puebla se desfondará, pues además de los seguidores de los alcaldes y legisladores que apoyarán al barbosismo, también está Alejandro Armenta Mier, quien ya se había agenciado buena parte de la estructura tricolor y trabajan abiertamente para él.

Esos dos grupos generarán un boquete en las filas del tricolor. Y súmele usted que hay un buen número priistas que están cansados de sus dirigentes y de que han sido relegados y ya han anunciado o amenazado con irse, pues esta será su oportunidad de oro y no la dejarán pasar. 

En Puebla, de acuerdo a las cifras del INE el Partido Revolucionario Institucional tiene sólo 4 mil 228 afiliados, aunque en la página web del ‘expartidazo’ aseguran que son más de 38 mil. A ver con cuántos quedan después del proceso interno de Morena.

Así que no dude en que se cumpla la tercera vía, como la calificó Eduardo Alcántara, en la elección del 2024 y el PAN en lugar de ir con el PRI y PRD, que son unas rémoras, mejor decida irse en alianza con MC.