Este país se gobierna  “con otros datos” muy distintos a los  que usted y yo podemos tener como gobernados.

 

“Con otros datos” se toman decisiones en materia de seguridad, de salud, económica, financiera, educativa, social, de desarrollo.

 

“Con otros datos” que posee la cúpula que toma decisiones se toman decisiones que sobre la marcha resultan contraproducentes.

 

Y es que ante todo, quienes están encargados de reportarle al presidente lo que pasa fuera de Palacio Nacional, maquillan y suavizan los reportes, alteran los datos y lanzan a su jefe al escenario con desconocimiento del contexto que vive la nación que gobierna.

 

Mientras el vecino poderoso hace acopio de estrategias para enfrentar un fenómeno de recesión, en México se nos hace creer que vamos mejor que los Estados Unidos y que no hay riesgos de recesión, tema sobre el que el presidente ya se molesta.

 

Al presidente le hicieron creer que con un decreto con su rúbrica, Nuevo León va a tener agua.

 

Usted se pregunta ¿Con su firma es suficiente?

 

Con este decreto los gobiernos federal y estatal quedan comprometidos a unir esfuerzos para llevar el vital líquido desde donde sea necesario.

 

De ese tamaño.

 

Con actitudes y una cruzada de desvirtualización, el presidente mandó al diablo el cubre bocas y se lanzó a mostrar su impecable dentadura, y ya vimos cómo se nos complicó la pandemia y los más de 327 mil 411 mil muertos que ha costado.

 

Con un total desconocimiento habla del control sobre el encarecimiento que registra la canasta básica, y usted y yo nos molestamos porque el encarecimiento y a la vez el empobrecimiento que registra la población están totalmente fuera de control como cualquier país, porque hay que admitir que se trata de una problemática múltiple por factores internacionales como la pandemia con su semiparalización de más de 24 meses; la invasión de Rusia a Ucrania, la baja producción agrícola por falta de insumos, falta de agua, y el abandono de tierras por problemas de seguridad.

 

Y si así nos vamos, no concluimos y entendemos lo complejo de la problemática, pero sobre todo, el desconocimiento sobre lo que están enfrentando más de 130 millones de mexicanos que engrosan las filas del ejército de empobrecidos por los problemas post pandemia.

 

¡Qué pena! que en los días de la 4T se mantengan las estrategias y mañas con las que siempre se ha gobernado a ojos vendados.

 

Usted ¿qué opina?