Habrá cambios en la iniciativa presidencial de Reforma Eléctrica, tanto de propuestas hechas por Morena, como de participantes en el Parlamento Abierto, de partidos políticos y hasta del gobernador de Hidalgo, Omar Fallad, quien propuso que el servicio eléctrico sea considerado como un derecho humano.

 

             El PRI está de acuerdo en que el Estado sea el que tome en sus manos el control de este servicio y de que el precio para la electricidad doméstica esté al alcance de todos los hogares.

 

           Afirmó el diputado poblano Ignacio Mier, que en el primer semestre de este año se aprobará la iniciativa presidencial, como los ajustes que se le harán de común acuerdo los legisladores.

 

          Ignacio Mier, que es el coordinador de la bancada mayoritaria y quien ha llevado las negociaciones con las bancadas de partidos opositores, reconoció que se harán los ajustes propuestos por partidos, expertos en la materia, funcionarios de la Comisión Federal de Electricidad y participantes en el Parlamente Abierto.

 

           Mier Velazco ha llevado a cabo las negociaciones con habilidad política y considera que las comisiones de Energía y Puntos Constitucionales, podrán instalarse en cualquier momento y esperar que la Junta de Coordinación Política les envíe la relatoría con las conclusiones del Parlamente Abierto, para empezar a trabajar en el dictamen, el cual debe estar listo en este primer semestre del 2022.

 

             SEGÚN NOS DIJO AYER UN CONOCEDOR DE asuntos de seguridad, algunos grupos o cárteles de la delincuencia organizada que operan en el país, tienen la intención de fortalecer sus acciones en la entidad poblana.

 

            Los hechos delictivos cometidos en últimas fechas indican que los llamados Rojos, que vienen de Guerrero, el Cartel Jalisco Nueva Generación y cárteles que operan en el vecino estado de Veracruz, están operando en la zona mixteca, en la región central del estado, en la parte oriental, como Tehuacán y Ciudad Serdán y en las regiones de la sierra norte, principalmente Huauchinango y Xicotepec de Juárez.

 

            Las autoridades estatales deben poner toda su atención en esas zonas para que Puebla no se vaya a convertir en centro de cárteles delincuenciales, como lo son los estados de Michoacán, Jalisco, Colima, Zacatecas y Guanajuato, entre otros.

 

           El gobernador del estado, Miguel Barbosa, ha dicho ya que el Gobierno estatal es más fuerte que la delincuencia organizada y que se actuará con toda energía para evitar que la inseguridad y la violencia prevalezcan en el Estado.

 

           Sólo se necesita inteligencia, un buen plan y una buena coordinación entre las fuerzas de seguridad de la Federación, del Estado y los municipios.

 

           EN ESTE ESPACIO DIJIMOS QUE EL PROYECTO del gobierno municipal panista de suprimir algunas juntas auxiliares porque ya están integradas a Puebla y la intención de que se hiciera un replanteamiento para suprimir juntas auxiliares en la entidad, provocaría una revolución y ya los mismos panistas se dividieron por eso.

 

           El PAN no es un partido que conozca a fondo los verdaderos problemas municipales. Siempre fue un partido urbano y la prueba es que de 217 municipios que tiene la entidad, no tiene presencia con comités municipales de ese partido, ni siquiera en cien.

 

           Sus dirigentes, que siempre se han movido en la ciudad de Puebla, Tehuacán, Texmelucan, Teziutlán, Huauchinango, Atlixco y otros municipios importantes, ignoran que la entidad cuenta con siete municipios con menos de mil habitantes, es decir, menos de los que tienen muchas juntas auxiliares; que hay 12 municipios con menos de 2 mil habitantes y 20 municipios, con menos de 3 mil.

 

              ¿Por qué el PRI, partido que gobernó a este país por casi 80 años seguidos, nunca se metió a buscar una reorganización municipal? Porque ellos sí conocían cuál iba a ser la reacción de la gente.

 

             El primer gobernador panista en la historia de la entidad, el señor Moreno Valle Rosas, lo dijimos ya, desapareció las agencias alternas del Ministerio Público que cubrían una necesidad, en un 90 por ciento, y las denuncias por abusos o delitos cometidos en las juntas se vinieron abajo, no porque se haya abatido la delincuencia o los abusos, sino porque los interesados en vez de trasladarse a las cabeceras municipales donde había ese servicio, optaban por no denunciar y defenderse por su propia mano.

 

             Durante el breve gobierno del licenciado Guillermo Pacheco Pulido, que fue gobernador interino, se recompusieron las cosas, porque él sí conoce la realidad política y social del estado.

 

            EL MUNICIPO DE CHIETLA, TIENE UNA JUNTA  AUXILIAR que se llama Atencingo, más grande que la cabecera municipal, que es el centro cañero más importante de la región Puebla-Morelos, el de más alta productividad de azúcar, que cuenta con servicios, hospital del Seguro Social, con estadio de beisbol, con calles pavimentadas y con un movimiento comercial intenso.

 

            Atencingo ha querido convertirse en municipio y no ha podido lograrlo. Hace dos o tres años se le dio la categoría de Villa, pero hasta ahí.

 

            Tiene carencias, como el servicio de policía que hasta hace poco consistía en una ‘patrullita’, un caribe mal cuidado, que era la encargada de hacer recorridos los sábados por los bares y cantinas de la población, que son numerosas, para evitar escándalos y enfrentamientos entre los obreros que concurren a ellos.

 

             ¿Por qué no aceptan hacerlo municipio? Porque en vez de resolver un problema, se crearía un problema político de imprevisibles consecuencias.

 

               Y así como este caso, hay muchos en la entidad.