Aunque la definición del candidato a la gubernatura de Morena en 2024 se dará en el escenario nacional, incluso como parte del proceso de selección del candidato presidencial que sucederá a AMLO, que tal candidato gane y retenga Casa Aguayo para precisamente eso….¡ganar!, será una misión difícil.

 

Viendo las cifras finales de la votación, al bloque Morena-PT, incluso con el PVEM, simplemente no le da para ganar la gubernatura porque el bloque PRIANRD, con sus triunfos en la zona metropolitana, sigue siendo muy competitivo.

 

Así que si en 2024 los partidos neoliberales vuelven a unirse para presentar un candidato común, pues tienen muchas posibilidades de ganar la gubernatura de Puebla, así sea que el candidato de Morena sea Alejandro Armenta o Ignacio Mier Velasco.

 

 

Así que más les vale enfriarse a los que ya se andan calentando.

 

Veamos los datos duros que son los que mandan en las elecciones:

 

El bloque Morena-PT-Verde, nada más, anda casi 200 mil votos abajo del bloque PRIANRD por si andaban con el pendiente, todo de acuerdo al cómputo municipal de los votos realizado por el IEE.

 

Como partido, Morena obtuvo casi 600 mil votos. El PT se desguanzó de manera absoluta y se quedó con 126 mil votitos, unos pocos menos que el Verde, que de la mano de Jimmy Natale se fortaleció con casi 140 mil votos.

 

Total, el bloque de la 4T anda en los 864 mil votos.

 

Como partidos, el PRI sacó 432 mil votos de la mano de Néstor Camarillo, y aunque el PAN fue el partido que más perdió respecto de 2018, sus triunfos en la zona metropolitana le dejaron 524 mil sufragios, ya sin operadores estelares como Eukid Castañón y Rafael Moreno Valle. La colita del PRD salvó el registro con 80 mil votos.

 

En total, el bloque PRIANRD supera el millón de votos y prácticamente tiene los necesarios para ganar una gubernatura: un millón 36 mil, más o menos las cifras con las que ganó Moreno Valle en 2010 —un millón 100 mil— y Martha Erika en 2018 —un poco menos—.

 

Casi 200 mil votos en este momento es una diferencia brutal, complicada, casi 20 por ciento. Así que los Morenos y todos sus aspirantes y liderazgos se tienen que poner a chambear, llámense como se llamen y tengan el puesto que tengan porque al final les puede pasar lo que a Claudia: quedarse con la candidatura... y con las ganas de ganar.

 

Aquí pueden entrar las particularidades que no desvirtúan el análisis de las cifras.

 

Entre 2018 y 2021 Morena perdió 196 mil votos, casi la totalidad de ellos por culpa de Claudia que provocó un socavón en Puebla capital y la zona conurbada.

 

Aun así, le siguen faltando 100 mil votos para alcanzar al bloque del PRIANRD….por lo que también deberán fortalecer a sus aliados del PT y PVEM, y eso tomando en cuenta que el Verde jugará en 2024 si y sólo si Marcelo Ebrard es el candidato presidencial, y desde hoy puede decirse que no si la candidata es Claudia Sheinbaum.

 

Los 863 mil votos del bloque Morena-PT-Verde lucen mal si comparamos el millón 700 mil votos que recibió AMLO en 2018. Han perdido casi un millón de votos en la entidad en sólo tres años. Y otro López Obrador no hay.

 

 

Y por supuesto, tras este análisis comenzarán los asegunes: que si la elección nacional va a jalar a la local, que habrá que analizarse si el bloque PRIANRD se mantiene y un largo etcétera.

 

Pero en este momento la situación es así: el bloque Morena-PT-PVEM va por atrás.

 

Así que tiene tres tareas por delante:

 

Conseguir la unidad de todos sus liderazgos.

 

Dos, comenzar a perfilar dos o tres candidateables a la presidencia municipal.

 

Y tres y último, alejar lo más posible de Puebla a Claudia Rivera Vivanco que en 2024 puede provocar otro socavón.