Miercoles, 24 de Abril del 2024
Jueves, 29 Julio 2021 01:16

Acelerar la vacunación… pese a Abdala

Acelerar la vacunación… pese a Abdala Escrito Por :   Arturo Rueda

Un ejemplo de ello fue la gran innovación de esta semana en el acuerdo con la Volkswagen para crear un centro de vacunación masivo y dar acceso a los obreros de la principal empresa de Puebla. No fue un privilegio para la trasnacional, sino un gana-gana ideado por Barbosa, con una fuerte intervención de la secretaria Olivia Salomón.


 

A nadie le queda claro el por qué Puebla ocupa el último lugar en vacunación de todo el país, pero todos señalan a la indolencia del súper delegado Rodrigo Abdala como el causante del abandono que apenas comenzará a ser remediado por orden directa de AMLO.

 

Puebla es el último lugar en cobertura de vacunación con apenas 26% de la población inmunizada, mientras que Baja California ostenta el primer lugar con 79%. La CDMX, a dos horas de nosotros, tiene el 75% de su población vacunada.

 

¿Por qué el abandono a Puebla?

 

Hay que preguntarle a Abdala, súper delegado del Bienestar, quien en el papel es el responsable logístico, pero en los hechos fue despojado de la responsabilidad, luego del caos que generó en las primeras jornadas en la zona conurbada. Especialmente grave, la gota que derramó el vaso  fue la muerte de una abuelita en Ciudad Universitaria. 

 

 

Ahora, entre sus muchos resentimientos en contra del gobernador, acumula el agravio de que la Federación le quitó la responsabilidad. Y con su política de brazos caídos, decidió que la Secretaría de Salud podía tener la logística, pero no las vacunas.

 

Barbosa lo dejó en claro hace unos días: vacuna que llega a Puebla, se aplica. No hay guardaditos. Y desde que la logística se entregó al Dr. Martínez y a la Sedena, ninguna desgracia ocurrió y las quejas de desorganización son mínimas.

 

Un ejemplo de ello fue la gran innovación de esta semana en el acuerdo con Volkswagen para crear un centro de vacunación masivo y dar acceso a los obreros de la principal empresa de Puebla. No fue un privilegio para la trasnacional, sino un gana-gana ideado por Barbosa, con una fuerte intervención de la secretaria Olivia Salomón.

 

Lo ocurrido con Volkswagen es un esquema de avanzada, casi sin referencia en otro lugar del país o una grandes empresas. De hecho, creo es lo que ocurrirá ante la prohibición momentánea de que las farmacéuticas vendan a empresas o agentes privados.

 

Si las empresas quieren seguir abiertas y no frenar sus actividades, ni que la variante Delta provoque un nuevo confinamiento, la única opción que tienen es acordar con los gobiernos estas Jornadas de Vacunación masiva.

 

 

Mauricio Kuri, gerente de Comunicación, en entrevistas radiofónicas reveló que la empresa puso la infraestructura necesaria, carpas, sillas, mesas y el recinto, además de la logística para que avanzaran lo más rápido posible, a cambio de que hubiera dosis suficientes para los empleados que se encuentran en el rango de 30 a 39 años para la primera dosis y 40 a 49 en la segunda.

 

A cambio de eso, obtuvo tres mil 500 vacunas para su personal. Que lo valioso no es la cantidad de vacunas, sino la idoneidad de poder transportar a su personal desde la planta y que sólo pierdan máximo un par de horas de su jornada.

 

A cambio de eso, la Volkswagen podrá ser certificada como un espacio seguro para trabajar libre de COVID, y un eventual confinamiento ya no los afectaría.

 

¿Qué ganó el gobierno estatal?

 

Hacer uso de un centro masivo como es la Unidad Deportiva VW que se sitúa en medio de los municipios más densamente poblados de la zona conurbada para agilizar la vacunación con más facilidades para los pobladores de la zona, y evitar dispersión de esfuerzos y recursos humanos para un personal en estado de agotamiento.

 

Nos falta un mes para el pico de la tercera oleada y ya las cifras de contagios, hospitalizaciones y fallecimientos indican que ésta va a pegar más de lo imaginado a causa de la variante Delta. Llegó la hora de acelerar la vacunación.

 

El único problema es un lastre llamado Rodrigo Abdala.

 

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