Si el gobernador Barbosa, el alcalde Rivera y el fiscal Higuera Bernal quieren saber la verdad sobre la tragedia de Xochimehuacan, así como las actividades ilícitas del ‘huachigas’ en la zona, la tienen fácil, pues sólo tienen que interrogar a una persona para que deslinde responsabilidades a: Gustavo Ariza Salvatori.

 

El secretario de Protección Civil es el primer responsable por negligente, pues tuvo ese cargo con Claudia Rivera y hasta el momento se mantiene en la misma posición con Eduardo Rivera. Y todo indica a que seguirá.

 

¿A poco Ariza Salvatori no sabía de los asentamientos irregulares, así como de los huachicoleros que azotan la zona desde hace varios años?

 

Ariza Salvatori es el zar de Protección Civil desde hace una década, pues llegó como Director de Protección Civil en tiempos del primer gobierno de Eduardo Rivera. Se sostuvo ahí en tiempos de Tony Gali y Luis Banck, fue ascendido con Claudia y se sabe que quieren mantenerlo respaldado con Enrique Guevara Montiel.

 

En esa década, una y mil veces se ha violado el Atlas de Riesgo en la zona, que prohíbe asentamientos humanos y comerciales sobre la franja en la que corren los ductos de gasolina y gas licuado de petróleo.

 

Y no sólo eso: Ariza Salvatori ha entregado los permisos en la última década para la operación de gaseras sospechosas en la zona que, en realidad, pueden ser fachadas para actividades ilícitas de huachigas, tal como sugirió el gobernador Barbosa sobre la gasera que está justo enfrente del terreno donde ocurrieron las tres explosiones.

 

Si alguien tiene el expediente de Gas Provincia, o Hidro Gas, pues precisamente es el titular de Protección Civil. Que le obliguen a enseñarlo. En 2016 él autorizó su nueva razón social e hizo las inspecciones.

 

Uno pensaría que Ariza es negligente y desde esa perspectiva es corresponsable de la tragedia en la que un poblano perdió la vida ―hasta el momento― y decenas su patrimonio.

 

Pero la historia es peor si tomamos en cuenta las versiones de la corrupción de Ariza, quien en esa década, que lleva como el zar de Protección Civil, incluso levantó una empresa de ambulancias 24/7, cuya presencia exige para la realización de eventos musicales y deportivos. De ahí salen sus moches.

 

Si el fiscal Higuera quiere una investigación seria, al primero que tiene que mandar a llamar es a Ariza Salvatori. También podría llamar a Fernando Errechin, jefe del jurídico de la secretaría, así como a María Fernanda Salmerón Ruiz, quien, se dice, se encarga de los cobros.

 

Tampoco estaría mal llamar a comparecer a Juan Pablo Cerwinka, el director de Atención de Emergencias, pues le ha tocado atender todo lo ocurrido en ese corredor de gaseras y huachicoleros. Todas las denuncias de tomas clandestinas, y huachitúneles, las desestimó y nunca encontró nada.

 

¿Fue por pendejo o por corrupto?

 

¿Después de las explosiones en Xochimehuacan en verdad va a sostener ‘Lalo’ Rivera a Ariza Salvatori?

 

Muy probablemente, pues en 2011 fue el primero en nombrarlo al frente de la Dirección de Protección Civil. Y de ahí se siguió en el cargo.

 

Quizá por ese hecho deriva la “mesura” de Eduardo Rivera ante el oficio inculpatorio firmado por el presidente de la junta auxiliar Cesar Juárez, dirigido a la entonces directora y hoy regidora Elisa Molina, que puso en evidencia la responsabilidad de Claudia y René Sánchez Galindo.

 

Pero Ariza Salvatori fue parte de ese gobierno desastroso. ¿También lo va a investigar la Contraloría Municipal o lo van a observar en el acta de entrega-recepción?

 

Y si Eduardo Rivera no lo sienta en el banquillo de los acusados, absorberá la responsabilidad de los próximos desastres que se avecinen en materia de Protección Civil en toda zona.

 

El gobernador Barbosa, el edil Rivera y el Fiscal Higuera la tienen sencilla: todos los ojos sobre Gustavo Ariza Salvatori.