Apenas ha cumplido los primeros noventa días de su administración, pero Eduardo Rivera ya tiene un plan de salida para cuando deba pedir licencia para materializar su candidatura al gobierno estatal allá por febrero de 2024. Su gobierno durará poco más de dos años, por lo que alguien debe cubrirle las espaldas.

 

No es otro que su Gerente Municipal y alcalde suplente, Adán Domínguez, quien ya fue premiado por adelantado con el sueldo más oneroso del gobierno municipal: 90 mil pesos al mes, 33 por ciento más de lo que ganan los regidores electos en la planilla.

 

Se trata de un ‘sueldazo’, probablemente el más alto de Puebla con excepción de los titulares del Poder Ejecutivo, del Poder Judicial.

 

Adán Domínguez, con sus 90 mil pesos, gana más que magistrados, jueces y diputados locales.

 

¿Qué méritos tiene el Gerente Municipal para recibir ese ‘sueldazo’?

 

La Gerencia Municipal, lo dijimos desde que se dio a conocer el gabinete municipal, es una invención de Eduardo Rivera.

 

No tiene sentido desde la perspectiva de la administración municipal, porque el City Manager anglosajón es el funcionario que se encarga de la prestación de los servicios públicos municipales. Pero en este trienio, precisamente, se creó una secretaria de Servicios Públicos. Ahí ya hay duplicidad de funciones.

 

Pero en realidad es una triplicación de funciones: Presidente Municipal, Gerente Municipal y secretario de Servicios Públicos. Con ello, Eduardo Rivera deja en evidencia la vocación del PRIAN por la creación de burocracias doradas premiadas con sueldos indecentes que no están al acceso de 9 de cada 10 poblanos.

 

Ni siquiera la iniciativa Privada paga esos sueldos. En Volkswagen, la empresa más exitosa del estado, los sueldos para los gerentes de área se encuentran entre los 75 y 85 mil pesos, más prestaciones.

 

En pocas palabras:el Gerente municipal Adán Domínguez recibe un sueldo obsceno por oscuras razones que no tienen que ver con su talento, ni con su función.

 

Cuestionado al respecto, el alcalde Rivera defendió el ‘sueldazo’ que asignó a quien hace una década fue su secretario particular en la administración 2011-2014: “lo que hace un gerente en cualquier otra parte del mundo, en cualquier parte de la administración pública nacional, es eso, se encarga de administrar el gobierno de la ciudad, es quien coordina todas las áreas de gabinete, coordina todo el trabajo del gobierno de la ciudad, es el trabajo que hace”.

 

Miente el edil Rivera porque tal puesto no existe ni en todo el mundo, ni en todo el país, ni en todos los municipios.

 

La Gerencia Municipal de Puebla es un invento de él para premiar a quien será el edil sustituto en febrero de 2024, cuando Eduardo Rivera deje el gobierno de la ciudad al cumplir apenas dos años de su trienio, y en su sustitución entre Adán Domínguez. Y nada mejor que premiar esa lealtad por adelantado con 90 mil insultantes -no para ellos- pesos.

 

En efecto: nadie debe equivocarse. El sustituto de ‘Lalo’ no será ni Pablo Montiel ni Enrique Guevara ni Bernardo Arrubarrena, todos ellos miembros del Yunque.

 

Por supuesto, hace falta dos años para que ocurra, y la exigencia al Gerente va a ir creciendo, pues conforme al plan, Eduardo comenzará a ausentarse de la ciudad para arrancar campaña al interior del estado, por lo que Adán se va a quedar al frente pese a que ni un poblano le dio un voto para convertirse en una especie de vicepresidente municipal.

 

Ya veremos, pues por Palacio Municipal dicen que con tanto poder y dinero, se despertó en él una vocación Casanova por conquistar a mujeres guapas que trabajan en el Ayuntamiento.

 

A ver si el Gerente no es la versión panista de Andrés García Viveros.