Alfonso Esparza Ortiz destituyó a Guadalupe Grajales y Porras como secretaria general de la BUAP, después de que hizo público su interés en competir por la rectoría de la universidad, con esto el rector saliente de la universidad le ‘limpia el camino’ a la académica Lilia Cedillo para que se encamine a relevarlo en el cargo.
Información oficial. pic.twitter.com/WcXvmgy6VM
— BUAP (@BUAPoficial) July 29, 2021
La máxima casa de estudios informó que Grajales y Porras fue separada de su cargo bajo el argumento de que el secretario general funge como responsable de los procesos electorales de la institución e interferiría con su candidatura por la rectoría de la universidad.
Además, en el comunicado se detalló que otros funcionarios cercanos a la secretaria general también fueron dados de baja de la institución por la misma situación, pero sus nombres y cargos no fueron revelados.
Con esto, Guadalupe Grajales entra en una lista de por lo menos seis perfiles que ya se destaparon en la búsqueda del puesto que está próximo a dejar Esparza Ortiz, entre los que destaca la académica Lilia Cedillo Ramírez, quien es cercana al actual rector y por quien se inclinan las preferencias.
Lupita Grajales responde: debe haber libre expresión en la BUAP
Sin embargo, horas más tarde Guadalupe Grajales contestó asegurando que el rector estaba en todo su derecho de elegir a quien quisiera para asumir el cargo de secretaria general, pero pidió que el cambio repentino de dicho puesto no entorpezca el proceso electoral que se tiene que efectuar en octubre.
La maestra Guadalupe Grajales Porras aseguró que su separación de la Secretaria General de la @BUAPoficial no modifica su decisión de contender por la rectoría.
Agregó que confía que este cambio no obstaculice la realización de las elecciones internas.@DeVivaVozabc pic.twitter.com/Zvv1fO1ozs
— Patricia Moreno S. (@abcpato) July 29, 2021
También mencionó que espera que con el cambio de rector por fin sea la comunidad universitaria la que tome las decisiones importantes de la BUAP, ya que es tiempo de que se respire un ambiente de libertad de expresión y democracia al interior de la máxima casa de estudios.
Finalmente, Grajales y Porras mencionó que no le afecta que le hayan quitado su cargo al frente de la Secretaría General, sino que la motiva más a luchar para ser una de las candidatas fuertes a quedarse con la rectoría en el próximo mes de octubre, para poder seguir defendiendo la autonomía universitaria.
José Alberto Pérez
@Josealberto_5